Capítulo 4: A beautiful girl

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Un brillo apareció sobre mí y me cubrió lentamente.

—¿Qué es esto?

—Será el comienzo —respondió.

Sentí un cosquilleo y cerré los ojos. Sentí poco a poco como el gran pelaje de mi cuerpo iba desapareciendo y mis extremidades se transformaban en unas más largas. ¿Acaso era esto real o una ilusión? Toqué mis patas, diré manos, y eran tan suaves. Toqué mi torso, mi...rostro. ¿Qué es lo que acaba de pasar? Sentí algo de frío, pero de un momento a otro sentí que una tela me cubría. Pude verla a penas y parecía de esas prendas que vestían las humanas. 

—Pareces una princesa —me dijo la voz. 

—Gra-gracias sonreí —esto..esto es tan sor...

(narrador omnisciente)

Martha no terminó de hablar ya que cayó desmayada. La voz se materializó en una curiosa niña de tutú. 

—Martha, las hadas existimos solo que somos muy tímidas y no siempre cumpliremos los deseos de todos —susurró —Me gustaría que seas muy feliz con esta nueva apariencia, sin embargo, todo tiene un límite.

El hada desabrochó el collar que tenía Martha en su cuello y lo guardó en uno de los bolsillos de su vestido. 

—Espero lo logres, pequeña. Trataré de ayudarte en lo que pueda.

La niña de tutú desapareció no sin antes robarse una de las galletas de la alacena.

Al día siguiente Paul despertó tarde. Estaba extrañado de que Martha no lo haya visitado como siempre. Se preguntó si había dejado la puerta cerrada pero no, ahí estaba entreabierta. Se desperezó y salió de su habitación, sintió un olor exquisito a café que provenía de la cocina, al dirigirse, se dio con la sorpresa al ver a una joven sentada en el comedor acariciándose con su diestra sus cabellos, y con la otra mano jugando con una cucharilla.

—Oh... —dijo John mientras salía con dos tazas de café humeante.

La joven al sentir la presencia de Paul, levantó rápidamente su rostro hacia él, dejándolo impresionado ya que nunca había visto a una mujer tan hermosa.

—¿Quién es...

—Lo mismo me preguntaba, tiene dificultad para hablar , creo que es tartamuda.

Paul un poco confundido apartó a John devuelta a la cocina.

—John, ¿invitas extrañas a casa?

—Ella estaba en esta casa. Mas bien yo debería preguntarte eso a ti. —mientras lo decía apuntó con su dedo el pecho de Paul —Ahora entiendo lo de Jane —fingió una voz de indignación.

—John, ¿me crees capaz de eso?

—Sí.

—¿Qué?

—Bromitaa— sonrió pero al ver que Paul no le correspondía cambió a un tono más serio —La encontré tirada en la sala.

—¿Qué?John, explícame todo—

John se acercó a la puerta y la observó.

—¿Por qué mejor no hablamos con ella? —dijo.





Martha my dear ♥  | The Beatles fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora