Capitulo trece: En las últimas
Estaba a la deriva.
Había inhalado bastante humo y aun sentía los escombros en su garganta mezclados con sangre...eran como vidrios, le desgarraban, le atosigaban y le volvían loca cada vez mas.
Las costillas le ardían y los pulmones parecían no tener ganas de respirar por sí solos, de nuevo, volvía a tener sangre en toda su ropa.
Una gran parte de ella estaba convencida de que se trataba de su sangre, pero... otra pequeña le susurraba de forma molesta que ni una gota le pertenecía. ¿Acaso sus mangas estaban siendo decoradas con porquería caminante? ¿Tendría sangre de Daryl en sus jeans? Estaba segura de que las gotas guindas que adornaban su cara pertenecían a Philip, pero, ¿Y lo demás? Toda su ropa, su cabello, sus brazos...
Estaba harta de huir, cansada de lo mismo. Solo quería que esto terminara de una buena vez, deseaba que los gruñidos detrás de ella pararan de un momento a otro para poder tirarse en la hierba a llorar.
Su arco se había ido al carajo hacia una media hora cuando las flechas se terminaron y tropezó intentando huir. No tenía nada...bueno, casi.
Entre todo el caos y las balas que pasaban zumbándole, encontró una vieja bolsa que, seguramente, pertenecía a la comunidad de Blake. Adiós a su raída mochila, ahora se tenía que aferrar a una olorosa maleta gris.
Ya ni siquiera corria...le costaba mucho caminar y se estaba mareando. ¿Acaso los caminantes nunca se cansan cuando tienen comida enfrente? A veces, los envidiaba.
Llevaba unos cuantos minutos pensando en subir a un árbol, pero ella estaba bastante débil y quizá ni llegaría a la mitad sin caerse. Necesitaba encontrar uno lo suficientemente alto y fácil de subir, si no, su pie le fallaría y seria comida para caminantes.
Había algo que no entendía, algo que no le cuadraba aun... ¡Deseaba morir! Seria placentero caer al suelo y gritar de dolor mientras la comían...y si tanto deseaba parar de correr para terminar con su vida, ¿Por qué seguía andando?
¡Fácilmente, podría darse un descanso recargada en un tronco y esperar pacientemente a que la mordieran unos cuantos caminantes!
Sin embargo...
Sin embargo, ahora estaba subiendo un árbol intentando no resbalarse y con la pierna notablemente dañada. ¿Qué le exentaba de pensar en una cosa y realizar otra?"Esperanza Jessica, eso es esperanza"
¿Acaso se estaba volviendo loca? Llevaba rato escuchando la voz de Hershel en sus oídos, la voz de Jesse y las risas de Dara. Ya no distinguía fácilmente la realidad de la ficción, solo deseaba dormir hasta que los malditos gruñidos pararan.
Cuando estaba comenzando a regular su respiración, las primeras gotas de agua le cayeron en la cara.
Genial, no sabía si ponerse contenta porque moría de sed o soltar maldiciones al aire a causa de la lluvia que, seguramente, le empaparía.
Aquella noche no durmió. Tampoco tenía mucho sueño; el dolor era como una anestesia ante todo lo que ocurría a su alrededor, de hecho, estaba recordando de poco a poco los sucesos de la prisión.
Muchas dudas rondaban su mente. De nuevo, había perdido el control y ahora tenía que ir pieza por pieza recordando que había hecho.
Hershel... ¿Qué había hecho con Hershel? Recordaba una furia irracional y su pobre cuerpo intentando arrastrarse en el suelo. Philip había terminado su trabajo degollándolo por completo, eso sí lo recordaba.
Por alguna extraña razón su vista se fijo en la bolsa que tenía entre sus manos, ahora que lo pensaba ¿Por qué razón la había tomado si ni siquiera sabía que contenía? O tal vez si sabía...
Ella no había matado al gobernador. De hecho, cuando Jessica se acerco a darle el tiro de gracia, fue por pura rabia. El ya estaba muerto antes de que comenzara a propinarle fuertes heridas con su cuchillo, e incluso mucho antes de impactar balas contra su cuerpo de forma demencial, era una locura.
Después recordaba haber alzado la vista hacia el caos que tenía enfrente, pero solo se había quedado mirando. No había alzado su arma para matar a alguien, tampoco había corrido hacia Carl cuando estaba siendo rodeado por algunos cebos de Philip.
Habia retrocedido ante el caos y sus pies habían tropezado con algo blando y viscoso.
El cuerpo de Hershel reposaba en el suelo sin su cabeza. Había un gran charco de sangre proveniente de su cuello, del cual, Jessica se había manchado todo el pantalón y parte de las manos.
No muy lejos - a unos cuantos palmos, de hecho- se encontraba la cabeza de Hershel con los ojos abiertos de par en par, tenia semblante mas pálido de lo usual y se encontraba sin vida.
Era una locura, Jessica había tomado la cabeza de Hershel entre sus manos y...después le había metido en aquella bolsa que olía mal. Después no había tenido tiempo de hacer otra cosa más que correr.
Ahora la bolsa gruñía irracionalmente entre sus manos y Jessica se encontraba totalmente en Shock mientras decidía si abrirla o no. ¿Hershel seguiría teniendo los mismos ojos azules de siempre? ¿Sonreiría como un niño o solo soltaría mordidas sin sentido para intentar comerla?
La lluvia aumentaba cada vez más y el follaje ya no hacía mucho por cubrirla. Los truenos eran sofocantes, Jessica se pregunto sarcásticamente si un rayo le caería...Pero tenía tan mala suerte, que no sería así.
Daba igual, era de noche y permanecería ahí un buen rato. Esta vez, nadie le llamaría Adamit mientras la tomaba en brazos para llevarla a un lugar seguro...solamente ella podría curar sus heridas. No habría más ex ayudantes de Sheriff a quien lanzarles cuchillos.
Esta vez, estaba sola.
ESTÁS LEYENDO
Daryl Dixon, el arquero. #PTWD2016
FanfictionSobrevivir. Un concepto bastante sencillo, pero una acción bastante complicada. Mas allá de ver Discovery Channel o ser parte de los Scouts, es tener que hacer cosas inhumanas para mantener a salvo a los tuyos, ingerir cosas que jamás creíste comer...