Capítulo 11 Bajo la superficie

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Serah y yo no tardamos demasiado en ponernos manos a la obra para localizar a mis hermanos, sentía como si a cada segundo que pasaba, mis hermanos tuviesen una oportunidad menos de seguir vivos...

Serah se detuvo, como muchas otras veces ya, olfateó el aire y, tras dudar unos instantes, echó a correr de nuevo conmigo tras ella en todo momento, literalmente tenía las patas destrozadas hasta el punto de casi no sentirlas debido a haber corrido durante horas sin descanso, pero aquello no era tan importante como el hecho de salvar a los únicos supervivientes de mi clan a demás de mi,  contando obviamente con que eran la única familia que me quedaba... Bueno, o al menos, eso pensaba yo en aquel entonces... Corrimos hasta el momento en el que el manto nocturno plagado de estrellas cubrió las llanuras, extrañamente cuando nos hallábamos sumidos en aquella completa oscuridad, eran los instantes en los que mis ojos eran capaces de vislumbrar casi todo lo que nos rodeaba sin excepción ni dificultad alguna, veía rocas, pastos moverse a lo lejos por la fría brisa de la noche y alguna que otra liebre correr despavorida cuando nos aproximábamos a ella. No fue hasta que el alba comenzó a despuntar en el horizonte que llegamos a nuestro destino, una gran colina cuyo interior estaba perforado sistemáticamente por numerosas galerías excavadas por los mismos lobos de las llanuras, aún era incapaz de comprender cuál era el motivo de que en aquel páramo no se viera un alma y el por qué del comportamiento del clan que habitaba estas tierras... Nos aventuramos al interior de las galerías en completo silencio, jamás me había adentrado en el territorio de otra manada pero cuando mis 5 sentidos se pusieron alerta, supe que adentrarse en territorio ajeno sin ser previamente invitado por el clan residente representaba 2 cosas seguras, primero, era la mayor afrenta que se puede realizar contra un clan, segundo, significaba un suicidio asegurado... Por mucho que me aterrase la realidad, era muy consciente de que las posibilidades de que mis hermanos siguiesen con vida eran cada vez más nulas, y eso me angustiaba profundamente... Un leve golpecito en el morro me hizo volver de mis pensamientos, había sido la cola de Serah, la cual avanzaba delante mía.

-Ellos siguen vivos...Céntrate

Me dijo simplemente, yo sabía perfectamente que podía fiarme con total seguridad de su olfato, exhale un leve suspiro de alivio dirigiendo mi mirada hacia mi guía... ¿Cómo había sabido qué preocupación ocupaba mi mente? Este obviamente, no era el momento para formular esa pregunta, pero me tenía realmente intrigado, ¿tal vez era demasiado transparente?...

(Era un lobo adolescente, yo también tenia mis inseguridades.... ¡Vale muchas inseguridades!, poneos a leer la historia y dejadme tranquilo ¬¬).

Continué siguiendo a Serah galería tras galería, descendiendo cada vez más... Aquellos túneles parecían llegar hasta el mismísimo final de la tierra, pero el calor extrañamente no aumentaba... Y lo más inquietante de todo era que no se veía ni un alma. En mi cabeza se volvió a activar aquella sensación familiar que recorrió todo mi cuerpo como una poderosa descarga eléctrica que puso completamente mis sentidos... Aquella sensación la había sentido antes, eso segurísimo... El caso era, ¿cuándo?, al cabo de unos segundos, una potente luz impactó en los ojos de ambos... Parecía una salida, por lo que nos apresuramos a llegar hasta allí... Lo que encontramos, simplemente es imposible de describir con palabras, pero lo intentaré... La galería desembocaba en un amplísimo bosque, espera, ¿bosque?, no era como los nuestros, era más frondoso y de las ramas de los árboles colgaban multitud de frutos lozanos de colores brillantes, los cuales parecían competir por ver cuál tenía el color más vistoso, al igual que las flores a cada cual más grande y llamativa... Una oleada de novedosos aromas, formas y colores nos azotó de golpe y nos dejó aturdidos durante algunos minutos, necesitábamos tiempo para asimilar la cantidad de información sensorial que estaba avasallando nuestro cerebros y nervios, asentándose en nuestra memoria para que fuese imposible que los olvidásemos... Cuando nos repusimos un poco de aquel golpe continuamos la marcha. 

Allí el olfato de Serah había quedado inutilizado por completo, ya que aún se hallaba aturdido, eché un vistazo a mi alrededor... Los árboles, que cubrían todo, tenían un tronco muy grueso y madera oscura, solo podían ser... ¿Robles? No, los robles daban bellotas, y estos árboles no daban nada que se le pareciese en absoluto.

Tras pasar, lo que me parecieron horas, recorriendo aquel inmenso bosque nos dimos cuenta de varias cosas: La primera, al parecer toda la flora y fauna ausente en las estériles llanuras de la superficie se encontraba aquí, y si... He dicho superficie, lo cual no lleva al segundo punto... Estamos BAJO TIERRA... ¿Cómo puede haber luz, vegetación y fauna en un lugar así? La respuesta la encontramos rápidamente alzando la cabeza, toda aquella luz, emanaba de un gigantesco prisma hexagonal con aspecto cristalino que levitaba en lo alto de aquella enorme caverna con forma de cúpula; el susodicho prisma desprendía una luz áurea de tonos rojizos y anaranjados, la cual emanaba de un orbe luminoso situado en su interior, suspendido en el centro... Era algo realmente digno y hermoso de contemplar, pero esa hermosa luz me transmitía un mal presagio debido a su tono rojizo, y por lo que sabía, rojo era siempre peligro, a demás la luz titilaba, no podía ser... Estaba... ¿Perdiendo su brillo?¿Cómo podía suceder que algo tan magnifico estuviese perdiendo su brillo?, una amargura y tristeza incomprensibles para mí llenaron mi pecho hasta casi desbordarlo en llanto y eché a correr. En ese momento supe de qué me sonaba la sensación que percibí por todo mi cuerpo antes, la sentí en el momento previo a que atacasen mi clan... Sabía que algo horrible iba a pasar, y que solo yo... Nosotros, Serah corría a mi lado, seríamos capaces de hacer algo... ella, al igual que yo, parecía movida por la misma sensación, la de que algo terrible ocurriría.. Nosotros habíamos conseguido llegar hasta allí por una razón... Y esa razón, no era otra que evitar lo que estuviese a punto de suceder... Evitar que otra tragedia, fuera cual fuera, tuviese lugar... Comencé a escuchar de nuevo esa voz en mi cabeza, la que solo era capaz de escuchar en momentos de extremo peligro

"Llegamos tarde la primera vez... Pero no volverá a pasar más... Llegaremos a tiempo esta vez..." 

Repetía incesantemente una y otra vez, la voz en mi cabeza... Entonces, llegamos al final del bosque... Y simplemente, no pude creer lo que mis ojos veían... ¿Ante mí, se hallaba la respuesta a mis visiones?¿La respuesta al por qué de la aniquilación de mi amado clan?¿La solución a la pregunta que me formulaba siempre..."Quién... Soy.."?


"Hay dos tipos de lobos en este mundo, los que saben amar y protegen, y los que creen amar y devastan aquello que dicen proteger"- Serah




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