It Is What It Is

Capítulo diecisiete

Despertar con una buena petada de WhatsApp en la que la mayoría de los mensajes eran de Lucía y Marta con enlaces de noticias de revistas del corazón en las que había titulares como «Harry Styles sale de fiesta por Nueva York» «Harry Styles, parece haber olvidado a la Directioner con la que fue visto en Londres» «El integrante de la boy band One Direction, Harry Styles, renueva su fama de mujeriego» «Harry Styles es visto ayer con una modelo mientras estaba de fiesta por Nueva York» no era la mejor forma de empezar el día.

Lo único bueno era saber que aquel día podría hacer lo que quisiese porque mi hermano no pasaría por mi hotel. Fue lo primero que me dijo al llegar. Aquella semana que pasaría allí vendría un día sí un día no, siempre y cuando nuestros padres no se enterasen.

Bueno, eso fue lo mejor del despertar junto con el mensaje de Louis que decía:

«Estate preparada a las 10 pequeña. Paso a buscarte. No preguntes a dónde vamos. Es una sorpresa»

«¿Qué me pongo?» Fue mi respuesta.

«Te lo digo cuando llegue.»

Me tumbé en la cama sintiendo que no tenía ganas de nada. ¿Tan pronto se había olvidado de mí? ¿Tan poco le había costado sustituirme? Trataba de no llorar para que cuando llegase Louis no lo notase. Y aquello me estaba constando enormemente.

Llamaron a la puerta y acudí a abrir aún en pijama.

Louis estaba al otro lado de la madera con una sonrisa radiante que, por más que intenté, no logré devolver.

-¿Cómo estás?- preguntó él cuando yo ya le daba la espalda.

-Lo mejor que se puede estar cuando te enteras de lo que ha hecho el chico que tanto te importaba anoche…

Lou agachó la cabeza y murmuró algo que sonó como un:”Harry es idiota…”

-Ponte un bikini- dijo de pronto.

Le miré escéptica. ¿Iba a llevarme a la playa?

-Pero…

-Tú hazme caso. ¿Has desayunado?- negué con la cabeza- Ahora pasamos por el bufet.

-Tengo el estómago cerrado, Lou.

-Pero tienes que tener energías para lo que nos espera hoy.

Le miré con preocupación.

-¿Dónde me llevas Louis?

-Tranquila, te vas a divertir.

-Creo que eso es imposible hoy.

-Al final del día te tragarás esas palabras- dijo optimista.

Entré al baño y di gracias a que había metido ropa de baño en mi equipaje. El móvil empezó a sonar fuera y Louis se acercó a la puerta para decírmelo.  Asomé la cabeza tapando mi cuerpo con la puerta y cuando vi el nombre de Harry escrito en la pantalla dije:

-Puedes llevártelo de nuevo a donde lo encontraste.

Él se encogió de hombros y obedeció.

Cuando salí, Louis me dijo que me echase crema protectora, pero solo en la cara. ¿De qué iba todo aquello?

Preparé una mochila con la toalla, ropa de recambio, crema solar, peine y demás cosas que podían resultarme útiles y bajamos a desayunar.

Louis empezó a llenarme el plato de cosas mientras yo reía pensando dónde iba a meterme todo aquello. La verdad es que estar con él hacía que pensase menos en Harry. Pero no podía apartarle de mis pensamientos por completo.