Capítulo 3 "Secreto"

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La noche había caído, Danna y Sebastiana habían preparado una cena la cual compartieron los tres en un agradable momento, Julia y Sebastiana tuvieron la oportunidad de conocerse un poco más.

El chico regresó a su casa un poco pensativo, aquellos ojos de la chica le habían parecido hermosos, pensaba en ella como si la hubiera conocido desde antes, sonrió al recordarla y siguió con su camino.

Mientras tanto, Julia y Danna estaban a punto de acostarse, la sirena quería contarle su secreto, para ella era demasiado que le compartiera su hogar y en el océano si alguien te dejaba entrar a tu arrecife, era por que se trataba de alguien de suma confianza

—Danna... hay algo importante que tengo que decirte —susurró Julia un poco nerviosa.

—Claro, dime –respondió Danna tranquila.

—Yo.... Soy una sirena —susurró mirándola, Danna no aguantó y soltó una carcajada, Julia se sintió confundida. —¿Que es tan gracioso?  —preguntó bastante confundida.

—Las sirenas solo existen en la fantasía, no son reales —negó tranquila.

—No, pero de verdad lo soy —susurró con tristeza.

—Creo que bebiste mucho vino tinto —negó riendo levemente. —Buenas noches Julia —dijo tomando su cobija y acomodándose en la cama

—Buenas noches Danna —respondió con tristeza.

[...]

Danna sirvió el desayuno y se sentaron juntas a disfrutarlo, mientras Julia seguía triste de que Danna no le hubiera creído

—Danna... yo —susurró nerviosa. —En verdad soy una sirena —insistió mirándola, Danna frunció el ceño.

—¿Sigues con lo mismo? —dijo seria.

—Pues ahora que lo sabes, lo tienes que ver —dijo levantándose. —Ven, vallamos al muelle.

Danna la miró confundida, Julia un poco molesta la tomó y la llevó a un pequeño muelle que había al otro lado de su casa, al llegar Julia se metió al agua, saliendo a la vista su cola naranja, volteó y miró a Danna, ella estaba totalmente asombrada, en shock, Julia sonrió y salió del agua arrastrándose para después secarla y regresar a tener piernas

—Cuando seco mi cola, me vuelvo humana —dijo saliendo al pasto y secándose

Danna aún seguía en shock, no podía creer que había visto a una sirena convertirse enfrente de ella, eso solo era mas que ficción, pero una vez más la realidad estaba superando a la ficción

—Jamas creí que las sirenas existían, ni siquiera que conocería alguna —dijo acercándose a ella.

—Pero es un secreto, ¿lo guardarías? —preguntó con un poco de temor.

—Claro que si —sonrió y la abrazó
—Bueno, cuéntame más sobre ti, quiero saber tu historia

Entraron a la casa hablando sobre la vida de Julia y el por qué estaba en la tierra, Danna estaba muy emocionada por saber más sobre las sirenas, ambas serían buenas amigas.

La Sirena  [Completa] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora