Fic de los personajes Trez y Phury de la hermandad de la daga negra. Una historia alternativa, fantástica y original de género homoerótico . Todos los derechos de la historia basada en la hermandad de la daga negra (BDB) pertenece a"The Black Dagger...
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Phury
-Hijo de puta...
Masculló entre dientes mientras me llevo la mano a la boca tanteando el líquido caliente que baja por mi barbilla, dejando un reguero de gotas rojas sobre mi camisa blanca que me recuerdan lo imbécil que he sido dejándome sorprender por este maldito sombra que me mira desafiante y altivo.
Si las miradas matasen yo ya llevaría varios minutos muerto.
Sus ojos grises ahora aparecen completamente blancos. Son unos ojos realmente extraños, nunca vi nada parecido en mis trescientos años de vida. He visto muchos ojos fascinantes entre mis hermanos, pero los suyos no lucen, más bien todo lo contrario, parece que absorben toda la luz que encuentran a su alrededor, y tiene que ser por eso que me atraen tanto... todo en este sombra es tan letal, peligroso y extraño que me resulta difícil mirar hacia otra lado teniéndolo a él en mi campo de visión.
Nunca me hubiera imaginado terminar la noche de este modo, sacándole las tripas a puñetazo limpio, peleando contra este tipo sin motivo. Y qué más da. Me muero por ver de qué color es su sangre, azul como la de un symphath, negra como la de un lesser o quizás sea tan común y roja como la mía.
Vamos...
Esta noche descubriré muchas más cosas de un sombra... y justo entonces el psicópata de Trez me sonríe con engreimiento, alzándose en toda su estatura. ¡Puto chulo de mierda!
La ira me embarga, no sólo por el golpe que me ha dado o por la espalda,que aun me late como si el corazón se me hubiera trasladado y alojado en esa zona, o quizás no tenga nada que ver con esto y sea por lo injusto de toda mi negra existencia, sea como fuere el va apagar ahora mismo una buena parte.
Pura y lacerante rabia me recorre las venas mientras sigo observando a la sombra alzarse frente a mí, orgulloso y tranquilo, como si tal cosa,como si mi inminente y agresiva reacción, una que se iba cociendo a fuego lento, no tuviera la mas mínima importancia para el. Por un momento me pareció atisbar una especie de arrepentimiento brillando en esos ojos plateados que habían recuperado otra vez la normalidad,pero fue algo tan fugaz que rechace mi locura al instante.¿Arrepentimiento? Anda ya.
Me Levanto del suelo, notándome en movimiento antes de ser consciente completamente de ello, al menos no lo soy hasta que mi puño impacta de golpe en la sien de Trez , dejándolo en el acto tambaleante y casi fuera de combate, cosa que aproveche para lanzar el siguiente, y después otro mas que impacto directo a la altura de las costillas,haciendo que la sombra terminará doblándose por la mitad. El cabrón no me responde ni a uno solo, y eso me hace pensar que es masoquista o un completo gilipollas. Porque débil o cobarde no es, jamas podría serlo trabajando para el reverendo. El dolor que se instala en mis nudillos me grita lo bien construido que esta el moro, las manos me hormiguean y se me entumecen los dedos poco a poco. Una certeza me llega de pronto cuando acabo por meterle un gancho directo hacia la mandíbula. Esta pelea era un perdida de tiempo, no iba a llevar a ninguna parte porque me sentía como si estuviera luchando contra uno de mis hermanos, todo fanfarronería y bullicio con poca cosa seria.Pero el jodido moro me enfurece de nuevo cuando aun doblado, decide devolverle el golpe, acercándome lo justo con la intención de propinarme un fuerte rodillazo. La cosa le sale jodidamente mal,porque su rodilla no hace precisamente contacto con lo que el espera sino que impacta con el inicio de la prótesis de mi pierna ortopédica. Si hubiera golpeado en la otra el dolor me hubiera puesto de rodillas. La sorpresa, el dolor, y la confusión que se apoderó de su rostro a su mirada cuando la fijó en mi, no tenia precio.