Sorry for Breaking your Heart || Ángelo Henríquez #YBWM2

4: "Reencuentro"

Javiera's POV

La Isi desapareció en un segundo de mi vista, no sabía dónde se había metido, comencé a dar vueltas por Juan Pinto Durán para encontrarla. No la podía encontrar, ¡Dónde se había metido esa niña! De repente sentí un grito, era ella, me dirigí al lugar del que provenía el grito. Cuando llegué al sector de los estacionamientos, la vi, ahí estaba con el chancho y a su lado estaba... ¡POR DIOS! ¡POR QUÉ JUSTO DE TODOS LOS JUGADORES TENÍA QUE ENCONTRARSE CON ÉL!

—MAMI ENCONTRÉ A BEBÉ ALEXANDER— gritó la Isi. Él dirigió su vista hacia mí. Esto era lo que quería evitar, no quería volver a verlo y menos que mi hija estuviera tan cerca de él. Mis manos empezaron a sudar, los nervios crecieron en mi estómago, eran tantos sentimientos, sentimientos encontrados, pero a la mierda lo que sentía, lo que tenía que hacer ahora, era sacar a la Isi de ahí.

—Isi vamos— le dije. Ella me miró y no se movió. — Isi, muévete. —ella negó con la cabeza.

—Javiera tanto tiempo— dijo él. Mirándome atentamente. Esto era muy incómodo. No me gustaba sentir su mirada sobre mí.

—Ángelo— dije. Luego volví mi vista a la Isi— Isidora tenemos que irnos, ahora. —ella volvió a negar con la cabeza.

—Si la niña no quiere irse déjala— dijo el Ángelo. Lo miré feo. ¿Por qué chucha se mete él? Él no tiene ningún derecho a opinar.

—Isi, vamos, tenemos cosas que hacer...— dije ignorando completamente a Ángelo.

—NOOO, no quiero ir a ningún lado— hizo un puchero— Mami... ME DUELE— gritó la Isi y se tiró dramáticamente al piso llorando. Ángelo se agachó a su lado. Yo fui donde ella e hice lo mismo.

—Déjame ver — le dije, ya que estaba tapando su pierna con su mano. Le aparté la mano y le miré, tenía una pequeña herida en la rodilla. —¿Cómo te hiciste esto?

—Se cayó— respondió el Ángelo.

—Isi tengo que desinfectarte la herida, vamos— la tomé de la mano y la levanté del piso. Ella se quedó estática en su lugar, no caminó conmigo. —Isi, camina— tiré su manito para que caminara.

—Javiera, ¿Acaso no ves que le duele? — dijo Ángelo. —Ven, yo te llevo— le dijo a la Isi, quién automáticamente le estiró los brazos, le encantaba que la llevaran en brazos. Ella se aferró con sus bracitos al cuello de Ángelo. Estaba muriendo, ver a mi hija en los brazos del Ángelo, fue algo extraño. No quería que él estuviera cerca de ella, él no quiso hacerse cargo de ella... Él no se merecía tenerla entre sus brazos...

—Ángelo suéltala— le dije. —Pásame a mi hija, yo la llevo.

—Javiera, yo la llevo, tú lleva al chancho...

—Ángelo, te dije que me la pases— le dije enojada. Él negó con la cabeza y comenzó a avanzar con la Isi, lo detuve e intenté quitársela, pero él la alejó de mí.

—¿Qué chucha te pasa Javiera? Solo la estoy llevando a la enfermería para que le curen la pierna— dijo él mirándome feo.

—Yo la puedo llevar perfectamente, no necesito de tu ayuda— y no la necesitaba, ni nunca la necesité. Me las pude arreglar perfectamente sola...— devuélvemela Ángelo.

—Solo intento ayudar, no es para que hagas el medio escándalo, aparte a ella le dolió la pierna por tu culpa, loca, ¿Cómo se te ocurre tirarla de esa manera? — lo miré indignada, ¡Qué se creía!

—¡Qué te pasa imbécil! Yo no le hice nada.... Aparte ¿Por qué te importa? Es mi hija, tu no tienes pito que tocar aquí. Así que por favor para de ser estúpido y pásamela— Estaba a punto de tirarme encima de él y quitarle a mi hija a la fuerza, es que me exasperaba.