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Contratada

No sabía que hacer en ese momento. Él hombre esperaba mi beso, yo una esacpatoría o una decisión buena. Si dejaba este trabajo pasar adiós piso y adiós vida independiente pero si lo acepto creo que este hombre no solo va a querer un beso... La verdad es que la vida independiente parecía bastante buena, podría dejar él sueldo de mi hermano. Trague saliva acercándome al que iba a ser mi jefe y más que eso, junte mis labios con los suyos en un beso sin lengua. Me separe de él completamente ya que me soltó la cintura.

--- Bienvenida--- dijo él hombre con una sonrisa en su cara, yo con la preocupación en la mente

--- ¿Quien me enseñara las oficinas?--- dije acercándome a la silla donde estaba mi bolso para cargarlo.

--- Marina, mañana aquí a las diez de la mañana ¿vale? Dile a Marina que te mando yo.

--- Vale Mrs.Doblas.

--- Llámame Rubén.

--- Vale Rubén, hasta mañana.

--- Hasta mañana.

Me metí en él ascensor y le di a la planta número 0. Las puertas se empezaron a cerrarse y solo pude ver la sonrisa de mi jefe mientras las puertas se juntaban. Suspire cuando ya estuvieron completamente cerradas y me puse contra la parez... Que estaba pasando...

Las puertas se abrieron y pude ver a Marina en la mesa donde recibía dudas de los clientes. Me diriji a ella con paso ligero mirando la gran sala donde a mi derecha tenía unos sofás completamente blancos igual que la sala salvo en suelo que tenía mármol gris. A mi izquierda estaba él mostrador que es donde me dirijia.

--- ¿Que tal la entrevista?--- pregunto la mujer con una sonrisa en la boca. Yo se la devolví aún que la entrevista fuese solo un aviso de lo que me esperaba.

--- Me han contratado, Mrs.Doblas a dicho que me enseñes la ofina que usare de ahora en adelante --- dije con poca gana y con mucha paciencia. Esta me sonrió y salio del mostrador con mucha felicidad.

--- Perdón por mi sonrisa es que va a estar bien tener a una mujer responsable por aquí andando y no solo ver esmoquins--- sonreí ante su comentario y salio del mostrador dirigiéndose al ascensor. Entramos En él ascensor y pulso la planta número 22, no estaba tan alto.

Cuando llegue mire las típicas oficinas americanas con un ordenador y una mesa, dos paredes que rodeaban estos objetos y pasada la pared otra, todo eso en un pasillo. Anduve junto Marina hacia él fondo del pasillo. Sentía la mirada de la gente, Marina me relajaba con su sonrisa. Al llegar al fondo de ese enorme pasillo con oficinas había una puerta blanca que abrio y mire una oficina completamente vacía, sin nada de objetos ni mucho menos.

--- Esta es tú oficina--- la mujer se aparto a la izquierda para que mi campo visual se estendiera y pudiera ver la inmensidad de la oficina. Jugué con mis dedos nerviosa y con la sonrisa en la cara.

--- ¿Ma-mañana puedo traer mis cosas?--- dije alucinada.

--- Claramente ____ ¿Le apetece comer algo?--- dijo Marina abriendo un cajón que tenía una cafetera con bollos...

--- ¡No me lo creo!--- dije acercándome, era como una niña pequeña. Mi sueño desde niña era hacerme publicista, que es lo que me ofreze este trabajo, y lo segundo era tener una buena oficina ¡estaba siendo todo perfecto! --- Perdón por mi actitud Marina, parezco inadecuada.

--- Yo solo te estoy viendo, andie más, no te preocupes--- sonreí muy confortable y mi móvil vibro, lo cogí y en contactos ponía "Juan", mi hermano.

¿Cuando vuelves de él
trabajo ese?

¡No se cocinar! Vuelve.

-Gracias por preguntarme
si me aceptaron.

Escribí rápido para no pasar de Marina ni mucho menos. Torzi mi brazo para meter mi móvil en él bolso.

--- Yo ya me tengo que ir--- le dije a María con una sonrisa acomodando mi bolso.

--- ¿Mañana a que hora?

--- A las diez de la mañana.

--- ¿Desayunas en tú casa?

--- No sabría decirte...

--- Bueno, te doy mi número y me dices si puedes desayunar en él Stracksburs.

--- Me han dicho que son muy caros... Yo no tengo sueldo, este es mi primer trabajo.

--- Pago yo, trnquila.

Sonreí y salimos de la oficina. Mi móvil empezó a vibrar él él ascensor y lo cogí.

¿Te contrataron?

¡Si! ¡Estoy emocionada
Juan!

¡Guay!

Vas ha hacer la comida

Me muero de hambre... :-\

Ya voy...

--- ¿Es tú novio?--- pregunto Marina muy curiosa mirando la pantalla.

--- ¿¡Que!? ¡No! Es mi hermano mayor... Vivo con él...

--- Vale, me alegro de que tengas un hermano tan comilón--- me reí ante su comentario.

Salí del gran edificio de Mrs.Doblas pero no sin antes coger él número de Marina, mi nueva amiga. Mire la hora y era la 14:00...

--- Mierda...--- corrí en dirección él metro a no más poder. Él metro salí a y cinco y eran en punto.

Esquive toda la gente posible que se encontraba en mi camino. Corrí y corrí tropezando con gente y demás pero aún así llegue tarde y él metro salio sin mi...

Empeze a andar camino a mi casa sin otra opción ya que no tenía suficiente dinero para él taxi. Ya tenía él billete de ida a mi casa pero terdi él metro. Camine y camine sin pensar en nada, hay veces que es mejor no pensar. Sobretodo si lo que piensas trata sobre él beso que le diste a tu jefe... Dios...

Media hora después llegue a casa y ví a mi querido hermano comiendo una pizza... ¿Para que me metió tanta prisa? Ni yo lo se.

--- ¿Por que me metiste tanta prisa si estabas comiendo?--- dije cruzando mis brazos en forma de enfado en la entrada del salón.

--- Mira en tú habitación...--- dijo comiéndose un cacho de su aperitivo.

Yo andé hasta mi habitación y cuando entre mire a una mujer que mi mente reconoció con él nombre de Coral, mi mejor amiga. Ella me ayudaba en todo.

--- Coral ¿que paso?

--- No me aceptaron... ¿Recuerdas donde te dije que quería estudiar?--- asentí con la cabeza mientras me sentaba en mi cama, que era donde ella estaba situada, deje mi bolso y la escuche atenta --- Pues no me aceptaron, dijeron que me faltaba un punto para entrar--- dijo con lágrimas en sus ojos, yo pase mis brazos por sus hombros para combertirlo en un abrazo. Sinceramente la quería mucho y no tenía que estar pasándole esto.