05

3K 125 31
                                    

Mía
Narra ____

Lo de Rubén había estado bien, sinceramente, muy bien. Se que seguramente paso por muchas cosas ya que sus ojos castaños aparentaban ser falsos, odiables, fríos.

Paciencia ____, paciencia... Paso por mi cabeza en un suspiro cansado en él ascensor con un toque de miedo. Mire al techo sabiendo que en ese piso tan alto, en él punto más alto, estaría esa persona con la que me encantaba besar, tocar... Una persona superior llena de fuerza en sus manos o eso es lo que aparentaba con su mirada en la penumbra y firme. No considero que sea una inútil pero ese hombre aparentaba que lo era muy dentro de él. Las puertas del ascensor se abrieron lentamente y mire a Marina delante mía. Solté un suspiro y puse una sonrisa falsa en mi rostro.

--- ¿Que tal con Mrs.Doblas? --- pregunto mientras yo me acercaba a ella.

--- Muy...--- suspire --- Divertido --- sonreí y deje que mis piernas parasen para dejar unos centímetros de separación

--- ¿Te ha dicho algo de los horarios?

--- No, ¿me lo podrías decir tú?

--- ¡Por supuesto!

Sonreí ya completamente liberada y ella me relajaba con sus ojos negros profundos, y su rímel que hacía que fuesen más bonitos y más temerosos.


Llevábamos ya bastante tiempo hablando sobre los horarios, las publicaciones más correctas, como usar él ordenador (que me hacia mucha falta) y no hablamos mucho de Rubén que fue lo que me alegro.

--- Se que soy una cotilla --- dijo Marina en su mostrador mientras yo sonreía --- Pero Mrs.Doblas siempre utiliza estás secretarias a... Bueno... Como decirlo...

Me lo pensé un poco antes de decir esto y... Por fin lo logré.

--- Si que me acuesto con él... Pero no me hace daño ni mucho menos, aparte a dicho que aparte de ese trabajo valorara las publicaciones, que es lo que me alegra ya que es mi verdadero trabajo --- sonreí dicho esto y ella me observo fulminantemente.

--- ¿No te ha hecho nada malo no?

--- No, que va...

Mis palabras se cortaron cuando vi entras a Doblas por la puertas de los cistrales con cara de no querer hacer nada, de enfado. Antipaticamente me miro y sonrió, yo se la debolbí. Mire a Marina ya que dio unos pasos para salir del mostrador dirigiéndose junto él señor Doblas, yo me quede mirando los papeles.

Narra Mr.Rubén

--- No será una más de tus juegos ¿no? --- dijo Marina con mucho enfado.

--- Probablemente, aparte, ¿Que te interesa? Mi vida en él trabajo no tiene que ver con Cara para nada.

Me cogió del brazo bruscamente y me arrastro de allí, menos mal que solo estaba ____ en la entrada. Me arrastro hacia una esquina de la sala y allí me empezó a hablar muy intimidante.

--- Escuchame Doblas, como le hagas daño no obtare otra solución que decírselo a tú querido jefe ¿escuchaste? --- un escalofrío paso por mi cuerpo

--- No lo harás...

--- Provocame, intenta hacerle daño a la chica ¡Atrevete! Haber cuanto aguantas...

...|rdgDonde viven las historias. Descúbrelo ahora