REBORN "Los días de ser ordinario se acabaron"

Epilogo

Me levante como siempre para ir a la escuela después de todo. La misma rutina, todo igual, excepto por qué yo soy el que salvó al mundo de una destrucción total.

Este era mi primer día de ir a la escuela después de mucho tiempo. No sé cómo los demás actúen o se comporten pero sé que no me trataran igual que antes.

-ya me voy mama.- agarre mis cosas y me fui.

Camine hacia a la escuela y sentía todas las miradas clavadas en mi, no sabía qué hacer así que seguía caminando.

Cuando llegue a la escuela, antes de entrar respire hondo. Era tiempo de comenzar de nuevo, ya que ya no me van a ver cómo Tommy, el que es incapaz de nada o que le gusta una niña que no está de mí mismo nivel o cosas así, si no que ve verán como alguien de quien deberían estar agradecidos y que no siempre por ser diferente no tiene derecho a estar con los demás.

Entre y en cuanto puse un pie en la escuela todos pararon todo lo que estaban haciendo para abrazarme y decirme gracias. Jamás me había pasado, hasta los maestros se acercaron. Lo único que hice fue sonreír y agradecer.

Seguía habiendo algunas personas rencorosas que solo me fulminaban con la mirada, pero eso no me molesto.

Lo primero que hice, además de asombrarme por el comportamiento de la escuela, fue ir a buscar a Bea. La busque por casi toda la escuela pero no había señales de ella. Pregunté algunas veces pero no hubo respuesta.

Me dirigí a la puerta de la escuela a esperarla cuando llegara. Me senté en una banca que había ahí y espere un rato. Todos los que pasaban me saludaban y sonreían como si fuese alguien famoso. Después de unos minutos vi que un coche llegaba. De él salió Bea.

Me dirigí hacia dónde estaba ella pero a medio camino vi que alguien más se bajó del coche. Era Kyle.

*Narra Malina*

Fue demasiado para mí. Había cientos de cosas que habían pasado en tan solo unos meses que aún me costaba digerirlo.

Hoy al fin iba a ir a la escuela como todos los demás, y lo que más me alegraba era que iba a asistir a la escuela de Tommy, así que por lo menos conocía a alguien ahí.

La pregunta que había estado merodeando por mi mente era como me verán en la escuela? Si me reconocerán o simplemente me ignoraran.

Me levante rápidamente, agarre mis cosas y me fui. No era tan largo el camino hacia la escuela, eran como unas cuatro cuadras. Camine emocionada pero al mismo tiempo nerviosa, hoy podría pasar de todo. Por años me mantuvieron apartada del mundo por miedo, por protegerme, me tenían estudiando en casa para que no tuviera contacto con nadie. Pero ahora es diferente. Voy a ir a una escuela donde la mayoría de las personas de Illinois van.

Llegue a la escuela, la verdad un poco nerviosa ante la situación, pero fue increíble. Todos platicaban con todos, otros jugaban futbol, comían, usaban su celular y algunos que otros besándose.

Una gran sonrisa iluminó mi cara, era obvio que este iba a ser el mejor día de mi vida! Algunos si me reconocieron pero se portaron agradables conmigo.

-hey, eres nueva?- me preguntó una chica de pelo corto pelirrojo.

-hola, sí.- sonreí.

-bien, soy Cam.- sonrío.- te puedo enseñar el lugar si quieres.

-soy Malina, y si, me encantaría.- Cam se quedó pensando.

-Malina?- preguntó.

-si Malina.- asentí.