Capitulo 11

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*Narra Bea*

No se lo que acaba de pasar. De verdad estaba furiosa con Tommy, tuve un momento de desesperación inevitable que hizo que mi mente se bloqueara por completo. La primera vez que lo bese, fue un beso vacío, en ese momento supe que no había nada entre nosotros dos. Nunca lo había experimentado, fue como si hubiera besado un árbol, frío y sin vida. Pero todo cambió en el segundo beso. Poco a poco mi mente se fue aclarando. Supe firmemente que Tommy sentía algo por mí y yo por el, las dudas se desvanecieron y entre más lo miraba a los ojos, sabía lo que él quería.

Me salí a mi pequeño jardín un rato. Fue un día largo, y más que eso, complejo. Pasaron muchas cosas que nunca imaginé que pasarían. Estuve ahí un rato sentada recargada en mi mano viendo el estanque de mama y viendo como los pájaros se bañaban, lo sé un poco aburrido, pero no podía hacer nada más, mi mente estaba en blanco.

-cariño?- oi la puerta abrirse y al mismo tiempo cerrarse. Era mi mama, había llegado de trabajar.

-hola mama.- dije entre dientes, no fui clara ya que mi mano impedía que mi boca se abriera.

-cariño? Te traje lo que me pediste para tu trabajo de la escuela.- me sentía como un zombie. Concentrada en un solo punto y mi cuerpo no respondía.- Beandralice.- hice un esfuerzo y me pare.

-qué pasa?- dije aún sin mi concentración total.

-como que qué pasa? Ven a saludarme.- sonrío gentilmente, lo cual yo no pude hacer.

-hola.- trate de soñar normal.

-pasa algo?- y creo que no funcionó, lo noto.

-nada mama, ahora sí me permites iré a dejarle esto a Charlotte.- dije agarrando las cosas del proyecto.

-ya está obscureciendo.

-lo sé no tardaré.- fui rápidamente hacia la puerta, parece que volví a reaccionar.

La casa de Charlotte no estaba tan lejos, estaba a un par de cuadras de la mía. Tenía que pasar tres semáforos y en la intersección a la izquierda. Hacía mucho tiempo que no iba a casa de Charlotte caminando.

Iba en el segundo semáforo y mientras pasaba iba analizando las casas, no tenía nada mejor que hacer mientras caminaba sola. Hubo una cosa que me llamó la atención, no lo divisaba bien pero era alguien como si no pudiese entrar a su casa. Decidí ir a ayudarlo.

Camine hacia la casa y me pare en frente, un poco lejos ya que él no me vio.

-hola.- le dije, para empezar una conversación. Alcancé a ver que el sujeto trataba de reconocerme y se nota que así lo hizo, inmediatamente sonrío y se paró.

-hey!- no lo podía creer, era Tommy!

-Tommy?!- sonreí.

-pero qué haces aquí?

-pues le tengo que llevar unas cosas a Charlotte pero jamás creí que me iba a topar contigo! Que haces afuera de tu casa?

-no lo sé, nos la clausuraron todo por mi culpa.

-que?

-si, el tipo de la renta me dijo que no le rentaba sus propiedades a Evos como yo.

-que! Porque! Que inepto.

REBORN  "Los días de ser ordinario se acabaron"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora