011: Madre

1.3K 108 13
                                    

No durmió en toda la noche, la sola idea de que los gemelos fueran sus hijos lo tenia vuelto loco, pensaba en como no se dio cuenta del parecido físico entre ellos ¿o acaso eran alucinaciones suyas?. Miró el reloj por centésima vez; 3:29 am.
Se levantó de la cama y se vistió lo más rápido que pudo.
Salió de la casa no sin antes dejarle a Nata una nota avisándole que saldría unas horas. Iba de regreso a la ciudad pensando en las posibilidades que había, miles de preguntas rondaban por su cabeza.
¿Serian sus hijos? ¿Emma lo sabía? Y si lo sabía ¿Por qué nunca le dijo nada? La duda lo estaba matando y tendría que esperar semanas para saber la verdad.

Después de haber conducido dos horas llegó a casa de su madre, a quien casi no veía ni mantenía contacto, pero en estos momentos era a la única persona a la que podía recurrir, no tenía amigos ni mucho menos amigas, lo más cercano era su secretaria quien sólo tenía una relación profesional y laboral con el. Tocó el timbre varias veces, justo cuando de rindió la puerta se abrió. Su madre estaba frente a el, con su canoso cabello ligeramente despeinado y con su rostro lleno de curiosidad al ver a su hijo frente a la puerta de su casa.

-Justin, no es que no me de gusto verte pero... Hijo, son las 5 de la mañana.- No le prestó la mínima atención y entró a la casa. Su madre cerro la puerta tras ella para mirarlo.

-Se que es muy temprano y casi no te visitó pero no estuviera aquí si no fuera por algo realmente importante mamá.- su voz ronca resonaba gracias al vacío de la casa.

-Entonces dime por Dios, no me gusta que se andén por las ramas.- la mujer se sentó en una silla, segundos despues.- Justin imitó el acto.

-Es sobre Emma.- la mujer rodó sus ojos en forma de fastidio causándole molestia a Justin. -Y antes de que empieces a expresarte mal de ella por favor escuchame.

-A pesar de los años la sigues defendiendo, ella ya no esta Justin, se fue ¿lo recuerdas?.- dijo ofendida.

-Hice mal en no defenderla antes de ti.- dijo triste. -Lo recuerdo perfectamente, ella se fue por mi culpa.- se señaló a si mismo.

-Y bien, ¿que pasa con esa?.- el le reprochó con la mirada. -Lo siento, ¿Qué pasa con Emma?.

-No me interrumpas, puedes hablar hasta que yo termine.- la sentenció.

-Si hombre como digas, habla ya.- movió su mano.

-Hace poco la volví a ver, ella ya esta casada y tiene hijos, su hija se perdió en un centro comercial y yo la vi, no sabía que era hija de Emma sólo quería ayudar a la niña, y bueno cuando ella fue hacia su mamá vi que era ella.- suspiró.
-Casi no hablamos ella puso distancia inmediatamente al verme, su hija me invitó a comer a su casa, y yo no acepte pero después la invite a ella y a su hermano que son gemelos a comer helado, por alguna razón Emma aceptó.- Justin se detuvo varios segundos, hasta que sintió la mirada impaciente de su madre. -Me enamore de aquellos niños mamá, y pues gracias a ellos empecé tener más contacto con Emma, aclaró que nunca los he usado para eso, y pues hace dos días la lleve a la hacienda y por una foto que nos tomamos, algo vino a mi mente y quiero que tu lo aclares.- su madre lo miraba inquieta, tratando de procesar correctamente lo que decía.

-¿Y que quieres que te diga?.- Justin sacó una foto de su chaqueta y se la extendió a su madre, esta la tomó y la analizó unos segundos, se quedó helada al ver a los niños de la fotografía.
-¿E...Ellos son los hijos de Emma?.- dijo temblorosa.

-Si mamá, son ellos ¿por qué?.- el no le diría sus sospechas quería ver si su madre podía notar lo mismo que el.


La mujer nerviosa se levantó de su silla y comenzó a caminar por todo el lugar con la fotografía en la mano, Justin sólo seguía sus movimientos expectante.

Querido Justin (2da Temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora