El cerezo y el odio |SasuSaku|

Capítulo 3-Ayuda

Miró a su alrededor, asustada. Ahora que había caído de llenó enfrente de unos desconocidos, no tendría escapatoria. En esos momentos solo pudo desear que Naruto estuviese ahí con ella, protegiéndola como siempre.

¿Que estas pensando, Sakura? Ya no necesitas que te ayuden, puedes tú sola. ¡Shannarooo!

—Anda Karin, mira lo que a caído del cielo, un bello ángel rosa.—dijo el albino cogiendo su mano y besándola cálidamente mientras le sonreía, mostrando una fila de colmillos de tiburón. Instintivamente la pelirrosa llevó su mano al porta kunais que siempre traía con ella.—Con que tenemos aquí una linda ninja. ¿Eres de Konoha?

—Deja ya de ligar, ¡baka!—la pelirroja le había dado un buen golpe en la cabeza al peliblanco mientras gritaba. Se ajustó las gafas y miró a la medic-jin instintivamente.—Yo no soy una idiota como éste de aquí; tienes un fuerte chakra, ¿que hacías escondida?

Aver qué me invento ahora.

—Cinco metros al sur se encuentran dos ninjas más. Seguramente sean sus compañeros de equipo, he encontrado a ésta subida a un árbol espiando. Sera mejor que nos la llevemos al jefe.—esa voz...sin duda era la que le había sorprendido minutos atrás.

Una cabellera naranja asomaba por su cabeza mientras un pájaro se posaba en su mano dulcemente.

—Que sorpresa, Jugo. Pensé que te habías quedado con el jefe.—la pelirroja miraba con duda al mencionado Jugo.

—Tienes que estar alerta, Karin. Aunque consigas detectar cualquier chakra, ya ves como algunos pueden pasar desapercibidos.

Naruto...Sensei...

—Tú, el pelinaranja, ¿has tocado a mis compañeros?—su voz temblaba, pero. aun así hizo lo que pudo por parecer segura de sí misma. Con un kunai en la mano, se levantó del suelo y miró a los tres sujetos delante de ella con seguridad.—Contestame.

—¿Acaso quieres enfrentarte a nosotros? Teñida.—Karin no paraba de reírse, aunque eso no afectó en nada a Sakura, ya había superado esa etapa.

—Como quieras, gafotas.—internamente se apuntó un punto en su marcador personal por la burla recién hecha.

Gracias, cerda, si no hubiese estado estos años discutiendo contigo, me hubiese afectado. Al final, eres mi mejor amiga.

—Esto será divertido, Jugo. ¡Intenta que no te machaque, pelo escoba!—el albino se estaba divirtiendo como nunca, y lo demostraba con su cruel comentario hacia su compañera de equipo.

Las dos se preparon, en cualquier momento una de las dos daría el primer movimiento, y cuando eso pasase...solo quedaría una.

Venga Tsunade-sama, ¡enseñemosle lo que valemos!

—Ya basta, Karin.—una voz fría destacó entre las demás.

Era esa voz. Fría, directa, sin miedo. Era...él. Instintivamente se llevo la mano al corazón, ¿acaso de verdad era él?

—Sasuke-Kun...—susurró.

•Ésta parte ha sido editada el 5/7/2016

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¡Besos kawaiis para todos!♡