Utopía, el inicio del camino: Cuervos -Fanfic Gay- [WIGETTA]

Capitulo 6

— ¿Qué significa domesticar?

— Es algo demasiado olvidado — dijo el zorro— significa crear lazos.

El Principito.

Zeus apresuraba el paso mientras se apresuraba a la celda de Guillermo con las cosas que su tío Luzu le había pedido, se encontraba aún un poco sorprendido por la actitud del mayor, no es que fueran unos monstruos y anduvieran matando personas por gusto y demás, solo le parecía un poco surrealista que Luzu se hubiese encontrado tan preocupado por un completo desconocido y sobre todo un desconocido que era un seguidor más de "El Líder", supuso que habría algo bueno en él como para que le protegieran de esa manera.

No supo que pensar sinceramente, había cosas que aún a su edad no llegaba a entender por completo, para él todas las personas que vivían en la capital y las pequeñas comunidades que se encontraban bajo el régimen utópico del gobierno no eran más que personas vacías, cascaras de lo que alguna vez habría podido ser un ser humano.

El menor tuvo que salir de sus pensamientos cuando se dio cuenta que se encontraba unos cuantos metros de la celda y el sonido de unos sollozos resonaban por el lugar, le pareció curioso y al mismo tiempo algo preocupante ¿Acaso su tío estaba llorando? Rápidamente avanzó los poco metros que le quedaban para quedar un poco anonadado con la imagen, frente a él estaba Luzu abrazando al prisionero y este lo sujetaba como tabla de salvación, era la primera vez que veía a uno de "ellos" llorar, de lo poco que había estudiado en clases tenía entendido que ellos ya no tenían más que las emociones de ira y miedo, solo tenían una mínima de sentimientos y aquello era demasiado surrealista.

— Gracias Zeus... — dijo Luzu, sacándolo de su cabeza. El menor se acercó y le entregó las cosas sin dejar de ver como el prisionero se quedaba estático en su lugar mientras Luzu acomodaba una cama improvisada y le daba unas palabras tranquilizadoras. — Muy bien Guillermo, Zeus se quedará a cargo por esta noche así que ya no tendrás que preocuparte más — siguió con su discurso el mayor. — Mañana decidiremos bien que hacer contigo, mientras tanto intenta dormir — dijo como último para después dirigirse a Zeus.

— Supongo que tu padre no se quedará mucho en la enfermería, sabes lo terco que es — el menor asintió, quizá no hablaba mucho con su padre pero lo suponía, él era igual. — así que espero poder venir con él luego de hablar con Alex, mientras tanto cuida del lugar, si escuchas que sigue llorando traerle un vaso con agua y saca unas píldoras para dormir del gabinete especial de Lanita, tienes mi autorización solo si es una emergencia ¿Me entiendes? — el menor volvió a asentir. — Perfecto, entonces nos vemos Zeus — Luzu colocó una mano en su hombro en forma de despedido y partió de ahí, dejando al menor con Guillermo.

Zeus rápidamente dirigió la mirada al hombre que se encontraba ya acostado en la improvisada cama sin dejar de llorar, sinceramente le daba un poco de pena, así que solo le aconsejó algo. — Mi padre dice que lo mejor para detener el llanto es pensar en cosas bonitas, sinceramente no creo que funcione mucho pero puedes intentarlo — comentó — Hasta mañana — cerró la puerta de la celda y se sentó en el piso a un lado, tendría una larga madrugada

Mientras tanto Guillermo solo apretaba los ojos con fuerza, la imagen de aquella niña no salía de su cabeza ¿Pensar en cosas bonitas? ¿Cómo demonios hacía eso? Supuso que solo se concentró un poco en los recuerdos que tenía, la tranquilidad de su vida, su familia, el trabajo perfecto, sus libros y las normas, todas aquellas cosas tan aburridas y cotidianas que tenía fuera de aquel lugar, sin embargo pensar en todo ello solo le hizo sentir peor, quería con todas las fuerzas dejar de sentir.

La mañana llegó tranquilamente para Samuel, se encontraba un poco mejor luego de descansar otro poco en la enfermería, a pesar de que no podía moverse mucho gracias a que la herida se había vuelto a abrir con el golpe de su querido nuevo inquilino no le parecía impedimento para continuar con sus actividades y claro lo único que tenía en la cabeza era los planes de un nuevo ataque, tenían que aprovechar cada segundo para poder dar pequeños golpes a las bodegas de la ciudad ahora que se encontraba un poco menos protegida.