Lo que se quiere

Pensamientos

No sé en qué momento dejé de comer, el plato está a la mitad. Entierro las uñas en la mesa y la marco. No puedo creer todo lo que Konan acaba de decirme ¿en realidad pasó? es más ¿qué pasó después que salí de su casa? Tengo ganas de vomitar y me siento peor que antes. La información da vueltas en mi cabeza y me golpea una y otra vez. Ya entiendo por qué me sentía culpable, porque había besado a Sasori y a Itachi, porque hice quién sabe qué con Itachi en el baño, porque me mostré débil frente a Sasori al besarlo, porque eso hizo que le dijera a Konan que me ama, porque Itachi lloró por razones desconocidas, porque NO RECUERDO NADA.

Me pongo las manos detrás del cuello y suspiro echando la cabeza hacia atrás.

-No sé qué pasó después -dice levantándose mientras lleva los platos a la mesa, yo no tengo apetito para comer más- no te pongas así, no hiciste nada -me anima.

En parte tiene razón, sólo había besado a un par de amigos, AMIGOS, y después fui con ellos a beber a un bar, a beber Deidara A BEBER. La culpa me sofoca y un ardor me recorre la espalda al recordar esas palabras ''Konan, amo a Deidara'' ¿será posible? ¿Sasori me ama?

La pregunta es ¿lo amo?

-¿Lo amas? -nuevamente Konan parece poder leerme el pensamiento, es hartante incluso cuando Sasori lo hace. Me hacen sentir predecible, o es que acaso ¿es tan fácil saber lo que estoy pensando?

-No lo sé -le digo la verdad, no lo sé. Nunca me he puesto a pensar en mis sentimientos hacia Sasori, solo he pensado en él, solo he pensado en su hermoso cabello rojo, solo he pensado en sus ojos y en lo mucho que me encantan, esos ojos que me miran fijamente cada vez que estamos juntos, sus labios y lo mucho que he soñado con besarlos. Me lastima saber que lo hice y que no lo recuerdo, que no recuerdo su sabor, que no recuerdo lo que se sintió tenerlo pegado a mí, que no recuerdo su mirada al besarme. Su piel, me encanta su piel, sus fríos dedos que me acariciaron el cuello con ternura, sus fríos dedos que estuvieron sobre mi y no lo recuerdo, no recuerdo la cercanía de Sasori, NO RECUERDO NADA.

-¿Estás pensando en él? -dice al sentarse. Levanto una ceja confundido, realmente puede leerme el pensamiento- estás mordiéndote el labio.

Tiene razón, me muerdo el labio con la esperanza de encontrar ahí el sabor de Sasori pero no está. No están sus labios y los quiero.

-Deidara -Konan llama mi atención- ¿en qué estás pensando?

-En Sasori -me levanto y me tiro en el sofá, siento arcadas.

Se pone frente a mí, me mira con ira.

-Sólo piensas en él por lo que te conté, si lo amaras realmente, lo habrías dicho. Si no tienes claro lo que sientes no juegues con él, que él sí te ama, le harías daño por un simple capricho -nunca me había hablado así, sus mejillas están rojas de la ira, la miro- no tienes idea lo que es sufrir por la persona que amas -alzó la voz.

Escucho la puerta abrirse y Konan queda en shock. Es Itachi, siento una explosión en el estómago pero sé que es de vergüenza, no sé como actuar con él sabiendo lo que hicimos anoche. Lo mejor será negar que algo pasó, que no recuerdo nada. Esa es la verdad NO RECUERDO NADA.

-Hola, dejaste tu billetera en mi departamento anoche -me la lanza.

¿En su departamento? ¿estuve en su departamento anoche?

-Gracias -respondo confundido, quiero preguntarle.

-¿Te sientes bien? -me dice ignorando a Konan completamente, la cuál lo miraba con la boca abierta.