Regresé a mi casa a las 10.45 iban a ser las 11 así que decidí no ir a la escuela mañana ya que mis padres iban a llegar temprano y quería verlos.
Me dormí un poco tarde, ya que tenía que lavar mi ropa.
Fui a mi habitación y me lancé a mi cama. Tan cómoda y cálida.
Llego el Señor Media-Noche a hacerme compañía.
-Señor Media-Noche...¿Qué se siente ser un gato?- Le pregunté al Señor Media-Noche.
-¿Miau?- Maulló el Señor Media-Noche.
-Olvídalo mi pequeño Señor Media-Noche.- Le respondí acariciando.
Me puse la pijama y me metí en las sabanas. Me quede viendo al Señor Media-Noche que estaba alado de mi acostado bajo las sábanas ronroneando.
"Gato..."
"Un gato lindo."
En tantos pensamientos que estaban pasando en mi mente,me quedé profundamente dormida.
*****************************
-¡Cariño! ¡Ya llegó el camión de la escuela!
-¡Ya voy madre!
-Te quiero demasiado hija mía.
-Mamá, yo también.- Dije besando la mejilla de mi madre para despedirme.
Ese día era el día de la madre. En mi escuela íbamos a hacerles una sorpresa.
Creamos una especie de "bordado" en una servilleta de tela. Decía: Te amo mamá.
Me quedo maso menos... Pero para mi edad era hermosa.
Regresé de la escuela feliz y ansiosa.
-¡Mamá!
-Scarlett.
-¡Mamá!- Grité de emoción y fui a abrazarla.
Le di mi servilleta que hice en la escuela y ella lloró de la emoción.
-Mamá... ¿Por qué lloras?
-No hemos estado mucho tiempo contigo... Eso me hace sentir mal.
-Mamá...
Me abrazó fuertemente apegándome a su pecho. Escuchaba su corazón latir... Ese latido materno de una madre que cuida de sus hijos con su gran amor y los apoya en cualquier momento.
-Perdona...
*********************************
Desperté con algunas lágrimas en los ojos...
Vi mi celular y daban las 12.09 del día siguiente.
"Mis padres ya deberían de haber llegado..."
Me dirigí a su habitación y no había nadie... Ni siquiera estaban sus maletas.
"Raro ¿no crees?"
"..."
Decidí llamar a mi madre... Primer tono... Segundo tono... Tercer tono... Cuarto tono... No respondieron.
"¿Estarán en el avión todavía?"
Eso fue lo primero que se me vino a la mente así que no me preocupe demasiado.
Bajé a la primera planta y me dirigí a la cocina. Abrí el refrigerador y busque comida... No había nada.
"Tienes que hacer algunas compras."
Me dirigí a mi habitación y me vestí con la misma ropa del día anterior.
Busqué mis llaves y las encontré en la mesa.
Abrí la puerta y salí dirección al súper Mercado.
Llegué y empecé a hacer las compras. Compré todo tipo de comida italiana ya que quería preparársela a mis padres cuando llegasen ya que a mis padres les encanta la comida italiana.
Pague todo con mi dinero.
Traía demasiadas bolsas en las manos así que por esa razón me tarde más cuando regresaba a mi casa.
Por el camino todos los recuerdos sobre Dominik estaban presentes."Dominik..."
"Te dejó sola."
"..."
"¿Crees que este bien?""No lo sé..."
"Pero quieres saber... ¿No?"
"Solo callate..."
"Dijo que no quería nada con nadie ¿no?""Estas en lo correcto."
Llegué a mi casa pero...Se encontraba un policía en la puerta.-Señorita Scarlett...Necesito hablar con usted en privado.- Me dijo el policía.
-Si claro.- Respondí con una amigable sonrisa en mi rostro.Entramos a la casa y dejé las compras en la cocina para luego ponerlas en su lugar.
-Señorita Scarlett...Antes de darle la noticia...Necesito hacerle algunas preguntas.- Dijo el policía sentado en el sofá de la sala.
Me senté enfrente de el, en el otro sofá.
-Si, adelante.- Afirmé.-Bueno...¿Había notado algo extraño en sus padres últimamente?- Preguntó el policía.
-No.- Respondí confundida.
-La ultima vez que los vio...¿Cuándo fue?- Preguntó el oficial.
-El domingo en la noche, a la mañana siguiente se habían ido temprano a su viaje.- Respondí.-¿A dónde se fueron de viaje?- Preguntó el policía.
-A Madrid...Se supone que van a llegar hoy.- Respondí.
-Bueno señorita Scarlett...Tengo que darle una mala noticia...-Dijo el policía sin ninguna expresión en su rostro.
"¿Mala noticia?""Si...Scarlett. Una muy mala noticia."
-Sus padres...- Dijo el policía con dificultad.
-Mis padres...- Dije mirando al policía directamente a los ojos.
-Sus padres han fallecido.- Dijo por fin el policía.
-¿Fallecido?- Pregunté.- Debe ser una broma ¿no?- Dije con algunas risas.
-Ellos...Se suicidaron en Madrid...Esta mañana los encontraron en el hotel en que se hospedaban. Ellos habían ingerido pastillas para dormir...Con alcohol. Lo lamento demasiado, señorita Scarlett.-Respondió el policía.Me quede shock...No sabía que decir...Tenia algunas lagrimas en los ojos.
-Dejaron una nota para usted.- Dijo el policía entregándome un papel doblado.
La carta decía...
Mi pequeña Scarlett:
Sabemos que haz estado sola demasiado tiempo...Pero es por tu bien...Ya que este día iba a llegar tarde o temprano.
Perdona si siempre te hemos dejado sola...Pero no sabía como cuidar a una criatura tan hermosa y bella como tú...Que simplemente te trate mal...Dejándote sola cuando más nos necesitabas.
Perdona, pero tu padre y yo habíamos tomado la decisión desde mucho tiempo.
Cuando quedé embarazada de ti... Apenas tenía 17 años, no sabía qué hacer contigo. Llame a tu padre y dijo que él se haría responsable de ti y que te cuidaríamos. Mis padres no aprobaban nuestra relación y menos si les decía que estaba embarazada.
Escapamos, tu padre, tú en mi vientre y yo.
Tenía el sueño de viajar por todo el mundo y tu padre también... Pero ahora teníamos que hacernos responsables de ti.
Por la razón de cumplir NUESTROS sueños y no los tuyos... Por eso siempre te dejábamos sola. Créeme la soledad es hermosa... Todo depende de cómo la veas tú.
Gracias por darme la oportunidad de amar como una madre.
Te amamos...
Te veremos desde arriba para cuidarte.
Adiós... Para siempre.Atentamente: Tu madre y padre.
Termine de leer la carta cuando mis ojos empezaron a llover.
"Sola...Totalmente sola..."
ESTÁS LEYENDO
¿Amor? ¿Qué es eso?
Teen FictionUna historia la cual podrás vivirla por medio de tu imaginación. Sentirás los sentimientos que provoca el amor o también recordarás los sentimientos que provoca un desamor. La emoción, la tristeza, los celos, soledad, rechazo y... A lo que también l...