Capítulo 28: Lothlórien (Parte 3)

635 48 2
                                    

POV Aralin

Los elfos habían construido una plataforma de madera o flet como se la llamaba en esos tiempos; los Elfos la llamaban talan. Un agujero redondo en el centro permitía el acceso a la plataforma, y por allí pasaba la escala.

Al llegar al flet, Legolas estaba sentado con otros tres Elfos. Llevaban ropas de un color gris sombra, y no se distinguía entre las ramas a no ser que se movieran bruscamente. Se pusieron de pie y uno de ellos descubrió un farol pequeño que emitía un delgado rayo de plata. Alzó el farol, y escrutó el rostro de Frodo y Sam para después apagar el farol y darles la bienvenida.

-¡Bienvenido! -dijo el Elfo- pocas veces usamos otra lengua que no sea la nuestra -siguió hablando con Frodo y Sam, yo me acerqué a Legolas quien estaba con el otro Elfo-

-Me llamo Haldir -dijo un elfo acercándose a mi logrando que me sobresaltara un poco, éste rió un poco- soy uno de los pocos que habla otras lenguas, al igual que mis hermanos, Rúmil -señaló al Elfo que estaba con Frodo y Sam- y Orophin -miró al que se encontraba con Legolas- algo habíamos oído de su venida pues los mensajeros de Elrond pasan por Lórien

-No habíamos escuchado de los hobbits o medianos desde años atrás...-dijo Rúmil- ¡no parecen gente mala! Y como vienen con un Elfo, estamos dispuestos a ayudarte, tienen que quedarse aquí esta noche ¿cuantos son?

-Nueve* -dijo Legolas- Yo, cuatros hobbits, dos hombres y una mujer...uno de los hombres es Aragorn y la mujer es su hermana Aralin -me miró sonriendo cuando dijo mi nombre- son de Oesternense

-Los nombres de Aragorn y Aralin, hijos de Arathorn son muy conocidos en Lórien, tienen la protección de la Dama, todo esta bien entonces -mencionó Haldir- pero sólo mencionaste a ocho, ¿quien es el noveno?

-¡Oh! El último es un Enano -dijo Legolas-

-¡Un Enano! -exclamo Haldir- no tratamos con Enanos desde los Días Oscuros, no se admite en estas tierras, no puedo permitirle el paso

-Pero es de la Montaña Solitaria -dijo Frodo-

-Elrond mismo lo eligió para que nos acompañara -dije, Orophin me sonrió para después ponerse a hablar en voz baja con los demás Elfos interrogando a Legolas-

-Muy bien -dijo Haldir- esto es lo que haremos aunque no nos complace, si Aragorn, Legolas y sobretodo la bella Aralin -me sonrió- responden por él, lo dejaremos pasar pero con los ojos vendados

Los Elfos le indicaron a Legolas que trajera a los otros hobbits, les ofrecieron comida la cual aceptaron con gusto, Legolas y yo nos quedamos sentados, en silencio y sin decirnos nada, al parecer los hobbits ya se habían dormido.

-Aralin -me llamó Legolas, voltee a verlo-

-¿Qué ocurre? -pregunté susurrando, quedándome casi dormida, él solo se acercó sonriendo y me dio un suave y corto beso en los labios-

-Descansa -sonrió y yo le respondí la sonrisa para después cerrar mis ojos poco a poco, lo último que vi fue a un elfo recogiendo la escala de cuerda-

* * *

Desperté con el ruido que un Elfo con capucha gris hizo, voltee a mirar a Legolas pero no se encontraba ahí.

-¿Qué pasa? -dije-

-Yrch -contestó el Elfo con un murmullo siseante y echó sobre el flet la escala de cuerda que habían recogido-

-Orcos...-susurré, voltee a ver al elfo pero ya no estaba, vi a Frodo muy concentrado en una parte del árbol, dirigí mi mirada hacia el mismo lugar y vi unos ojos que miraban hacia arriba, sin parpadear. de pronto se volvieron y una figura industinta bajó deslizándose por el tronco y desapareció, me acerqué a Frodo al mismo tiempo que Haldir llegaba trepando rápidamente por las ramas-

-Había algo en este árbol que nunca vi antes -dijo- no era un orco. Huyó tan pronto como toqué el árbol, parecía astuto y entendido en los árboles y hubiese pensado que era uno de los hobbits

-No tiraste ¿por qué? -pregunté-

-No podía arriesgarnos a un batalla, era una fuerte compañía de orcos y parecían estar siguiéndoles el rastro, nosotros tres no podíamos enfrentarnos a un centenar de modo que nos adelantamos y hablamos con voces fingidas -contestó Haldir- Orophin ha regresado de prisa a nuestras moradas para advertir a los nuestros. Ninguno de los orcos saldrá de Lórien y habr muchos elfos ocultos en la frontera antes de que caiga otra noche -anunció finalizando así la conversación

* * *

El día asomo pálido en el este. La luz creció y se filtró entre las ojalá amarilla de los mallorn. Un cielo azul claro se mostraba entre las ramas mecidas por el viento.

Cruzamos el Celebrant, Haldir amarró una cuerda al extremo de un árbol y un Elfo del otro lado hizo lo mismo con el otro extremo, Legolas y el cruzaron nadando mientras que los demás esperamos a que construyeran un puente liviano. Cuando la compañía estuvo reunida en la orilla del Cauce de Plata, los elfos desataron las cuerdas.

-Ahora, amigos -dijo Haldir- como habíamos convenido, le vendare los ojos a Gimli el Enano, los demás pueden ir libremente

-El arreglo se hizo sin mi consentimiento -refunfuño Gimli- yo no soy un espía, tampoco causamos daños a los elfos

-Tienes razón -dijo Haldir- pero es la ley, no soy dueño de la ley

Haldir y Gimli discutieron un rato, Gimli sacó el hacha del cinturón y Haldir y su compañero tomaron sus arcos.

-¡Malditos Enanos, qué testarudos son! -exclamó Legolas-

-¡Un momento! -dijo Aragorn- si he de continuar guando a esta compañía harán lo que yo ordene. Iremos todos vendados, aún Legolas, será lo mejor

-Haldir nos evara a todos atados a una cuerda, como mendigos ciegos guiados por un perro -dijo Gimli riendo un poco- pero si Legolas comparte mi ceguera, me declaro satisfecho

-Soy un Elfo y un hermano aquí -protestó Legolas enojado, casi nunca lo veía así-

-Bien, ahora gritemos: ¡¡Malditos Elfos, qué testarudos son! -dije riendo y Legolas me vio molesto- Ven Haldir, vendamos los ojos -le sonreí felizmente-

&&&&&&&&&&&&&&&&&

*Nueve: Son nueve porque como sumé a Aralin a la Compañía serían 10 y con la muerte de Gandalf pues serían los 9, sólo lo aclaro para que luego no se quejen de que pongo algo que no va con la historia original.

Hola....ya regresé ^^/ prometo no volver a dejarlos tanto tiempo

Amor Oculto (Legolas y Aralin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora