Nueve

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Justin
Bieber

De acuerdo, las matemáticas no son lo mío.

—Es muy fácil Justin—dijo Hailey—sólo tienes que sacar el valor de x. Eso es todo.

—Rindete muñeca—dije soltando un suspiro, pasando mi mano por mi cabello y soltando la pluma encima de el cuaderno.

—El único que se rinde aquí eres tu—me regaño.

—Ya no hagas corajes—pase un brazo por sus hombros—y si mejor salimos a patinar. No terminamos las lecciones.

—Mmh mejor no—recargó su cabeza en mi brazo.—y no las terminamos porque fuiste a ver a... ¿Celina?

Me encogí de hombros, no recordaba el nombre de la chica.
Hailey me dio un golpecito en la palma de mi mano por mi falta de memoria.

—¿Por que no?—tome un mechón de su cabello—No lo hiciste tan mal la última vez.

—Enserio Bieber, casi muero—me reclamó.

—¿Pero quien te sostuvo?—la vi rodar los ojos—exacto.

Al final no lo hizo tan mal como lo esperábamos. Aunque en un descuido terminamos cayendo los dos y como el trato era que si caía me daría tres cachetadas, ahora tengo que cuidarme la espalda de cualquier ataque de la pequeña morena.

—Aún así—rió—eres muy mal maestro. Te aprovechas del asunto.

—Tu pequeña, me ofendes—dramatice y toqué la punta de su nariz con mi dedo—soy el maestro más cool y guapo de todos los tiempos.

—Eres el maestro más feo que he visto en mi vida—soltó un carcajada.

—Soy más atractivo que ese Stephen James.—señale. Ella adora a ese tipo.

—Eso es imposible—dijo con orgullo—Stephen tiene todo lo que busco. Y algo que tu no tienes.

—¿Que tiene el que lo tenga yo?—pregunte arrugando el ceño y mirándola fijamente.

—¡Huevos!—y soltó todo la risa que guardaba.

—Yo tengo Huevos—dije indignado—tengo más huevos que cualquiera.

—Entonces por que te rindes con las matemáticas tan fácil—arqueo su delineada y oscura ceja—apuesto a que Stephen era bueno en las matemáticas.

—Y entonces por que no es Matemático en vez de modelo.

—Por que es tan hermoso y masculino que hasta el lo sabe y comparte su  belleza con el mundo.—señalo mientas agitaba sus brazos y manos.

—¿Porque estamos hablando de el?—bufe. Yo era tan o incluso más masculino y "hermoso" como ese Stephen.

—Tu lo mencionase primero—dijo dando un toque en mi mejilla.

Iba a responderle cuando mi celular dio un timbrazo. Alguien me llamaba.
Mire la pantalla del celular, pero el número me era desconocido.

—Bueno—dije, contestando la llamada. Mire a Hailey que me miraba interrogante.

—¡Justin!—grito alguien al otro lado de línea, haciendo que separa el celular de mi cara con fastidio. Hails se río por mi expresión, tapando sus labios con su mano.

Sorry ✧ bieber Donde viven las historias. Descúbrelo ahora