Flashback
Larry estaba nervioso, era la primera vez que invitaba a una chica a salir, a una cita de verdad y no sabía como actuar. Había cogido dos entradas para ver una película y después tenía planeado llevarla a cenar, pero no sabía si besar la o no besar la, tenía un enorme lio en la cabeza.
Por otro lado estaban las dudas de si la película le parecería bien, quizás era demasiado cliché, pero es que la verdad no se le ocurría otra cita sin parecer un desesperado. Quería llevar las cosas con calma por primera vez en su vida. No le interesaba solo el sexo, de ella quería mas, y no se lo podía explicar. Era una sensación extraña, pero desde que la conocía, cada vez que la miraba sentía un cosquilleo en el estómago. Era hombre y no iba a decir nada de mariposas revoloteando, porque eso lo dejaría ver como una autentica marica, pero si que sentía algo que con las demás chicas no había sentido nunca.
Cuando paró el coche delante de la casa en la que Vannesa vivía, tenía las manos completamente sudadas, por lo que antes de bajar del coche se las secó en el pantalón. Sin tiempo que perder salió del coche y caminó hacía la puerta, una vez delante de esta tomo una gran bocanada de aire y llamó a la puerta. Jessica le abrió la puerta,
– Buenas tarde Larry, pasa-. Dijo apartándose de la puerta para que él entrara, aunque nada mas entrar él ella cerro la puerta despacio y lo arrinconó en la pared-. Si me entero que la lastimas, o que tienes planes grotescos y nada caballerosos con ella, acabaré contigo, y haré que tú pene no sirva ni para mear. ¡Entendiste!-. Le advirtió Jessica en un tono que no admitía replicas.
– Si, claro que entendí. Pero tranquila, todos mis planes para con Vannesa con buenos.
– Mas te vale. ¡Vannesa! Tú cita ya está aquí.
De esa forma Jessica dio por terminada la charla y se encaminó de vuelta al sofá y siguió viendo La Sirenita, su pelicula favorita de Disney.
****
Cuando acabaron de ver la película Larry la sorprendió yendo a su restaurante favorito. Ella pensó que la iba a llevar a alguno de esos restaurantes de etiquetas, pero sin embargo la llevo al restaurante chino al que siempre iba con sus amigos.
Al terminar de cenar, después de una charla de lo mas entretenida, Larry la dejó en la puerta de su casa y se despidió de ella con un beso. Espero hasta que ella entró en casa y se marchó. Antes de entrar Vannesa tomó una bocanada de aire como hizo Larry horas antes y entró en casa.
– ¿Qué tal la película?-. Quiso saber Jessica
– Bien.
– ¿Solo bien?-. Inquirió Jessica frunciendo el ceño.
– La verdad es que fue mejor de lo que pensaba. Se comportó como todo un caballero.
– ¿Hubo beso? ¿Con lengua? ¿Besa bien? ¿Le metiste mano? ?Te metió mano el a ti? ¿Se propasó contigo? ¿Hizo algo a lo que tú no le diste permiso? ¿...-. Comenzó a preguntar Jessica hasta que Vannesa la detuvo.
– ¡Basta!-. La cortó Vannesa riéndose. Sabía que Jessica era muy intensa y pesada con sus preguntas, pero sabía que lo hacía porque se preocupaba de ella y eso hacía que la quisiera mucho mas-. Te he dicho que se ha portado como todo un caballero. Me ha traído a casa, se ha despedido de mi con un beso en la mejilla y ha esperado a que entrara para irse. Hemos ido al cine a ver una pelicula de ciencia ficción y después me ha llevado a comer a nuestro restaurante favorito Por lo demás no ha intentado nada, sus manos han estado muy quietas y a la vista siempre.
– Pues vaya chafo, yo esperaba que te besara por lo menos-. Gruño Jessica.
– De verdad, a ti no hay quien te entienda. Pero de todas formas te adoro-. Vannesa se dirigió hacia ella y le dio un beso de buenas noches y se fue a dormir.
****
Al llegar a casa a Larry le tocó el mismo interrogatorio, pero esta vez por parte de James su mejor amigo. Cuando Larry le contó todo lo que había pasado, James se quedó alucinado viendo como su amigo se iba a su cuarto tan tranquilo. ¡No había intentado nada! Su amigo había tenido una cita con una chica y no había intentado ni besar la. Sabía que esa chica iba a cambiar la vida de su amigo, y para siempre. Y con una sonrisa en su rostro se encaminó hacia su habitación.
Pues aquí tenéis la primera cita de Larry y Vannesa.
Espero que os guste.
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Gracias
Mariam :)
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Sin Confianza NO queda nada
RomanceVannesa Ferguson tiene 23 y desde que se casó tres años atrás tras quedarse embarazada su vida se ha convertido en una rutina diaria que la aburre. Su marido es un gran empresario y trabaja hasta tarde por lo que apenas tiene tiempo para ella y para...