No me rendiré

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Había regresado a casa hace un mes aproximadamente, le habían hablado de el Voleyball y sus sueños poco a poco se aclaraban mas, aunque no veía muchas personas escuchaba voces y golpes de balón, estaba ansioso por volver a entrenar, mas sin embargo eso no iba a ser posible todavía, debía esperar algunos meses a que su cuerpo reposara y se recuperara por completo, era extraño ser un libro en blanco, tenía una memoria sin sentido, a veces se preguntaba para que vivir si no podía recordar, y eso opresión en el pecho, todavía se angustiaba mucho al ver a Yamaguchi y las sensaciones que le provocaban, había aprendido a controlarse, puesto que el pecoso venia casi todos los días a leerle parte de un libro, uno que según él era su favorito, y era verdad que sentía felicidad cuando escuchaba cada párrafo de ese libro, es como si las preocupaciones se fueran, aunque el vacio quedaba hay.

Ese día su madre y su padre habían salido, su hermano no estaba y él se encontraba solo, el sonido de las aves de afuera no le gustaba, puesto que todo era callado y esos pajarracos irrumpían su momento de meditación, prendió la tele y comenzó a ver programas basura, era aburrido, ni se concentraba en el aparato, solo divagaba en su mente y trataba de recordar, por lo menos un rostro y así lo hizo, era esa señora rubia ... estaba curando la herida de una pierna y en el espejo de al frente se reflejaba a un rubio niño de gafas, ¿era él? Tal vez pues la similitud era muy notoria, estaba feliz, tal vez eso le garantizaba que esa humilde señora era su madre, dejo de darle vueltas al asunto y apago la televisora en busca de el silencio, el cual se hizo presente de inmediato, ya resignado y supremamente aburrido, subió lentamente las escaleras para ir a su habitación y relajarse un poco, pero algo le pareció curioso, desde que llego a su "hogar" no había tenido la mínima oportunidad de revisar en sus cosas, y eso hizo, comenzó a hurgar sus cajones y destapar algunas cajas, encontró algunas fotografías de él y Yamaguchi cuando eran más pequeños e incluso una se podría decir ... reciente que alguien les saco en un gimnasio entrenando ... ¿Cómo se llamaba? Si, Voleyball, encontró una colección de dinosaurios la cual le fascino, y le provoco una sensación familiar y de cariño, de nostalgia, encontró libros, cuadernos hasta una bolsa vacía de frituras, ¿el comía frituras? Vaya... eso era una sorpresa pues ahora las odiaba, su madre dijo que su personalidad no había cambiado pero algunas cosas como sus gustos se estaban distorsionando un poco, a punto de poner todo en su lugar un pequeño sobre le llamo la atención, era azul y pequeño decorado con varias estrellas en su portada, le echo un vistazo nervioso, sentía una descarga eléctrica con solo rozar sus dedos con la carta y al comenzar su confusión volvió a crecer

Sesenta minutos son similares por mucho a sesenta milisegundos, es abrumador tener la capacidad de mirarte a tus orbes y no poseer el simple valor para ver en dirección directa a tus ojos, tu existencia provoca que exploten todas esas sensaciones en mi cabeza, es como un éxtasis para mi podrida e hipócrita alma que luchar por ser liberada por un espíritu como el tuyo, somos seres corrompidos, nuestras mentes son perversas, capaz de manipular una memoria sin sentido, solo nos separan un millón de universos, nuestra diferencia es como la de la noche oscura en luna llena y el crepúsculo, estos sentimientos y emociones son tan verdaderos y tan fuertes que hasta el mismísimo tiempo podría manipularlos, pero estos seguirán intactos, porque nada crea más fortaleza en mi interior que tu y nada provoca tantas ilusiones como tus gestos y aunque aun me parece incomprendible la magnitud de este apego hacia a ti, es ilógicamente placentero el pensar que yo te amo

Tsukishima kei

Terminó de leer y se percato del sonrojo que había en sus mejillas, enserio él era capaz de escribir tales cursilerías, se felicitaba a el mismo por tan buena redacción y tenía razón "Ni el mismísimo tiempo podría manipularlos" pero cuando escribió eso se olvido de un pequeño detalle ... que tal vez el iba a perder su memoria y aunque sus sentimientos estuvieran intactos no tenía ni la menor idea de que persona era, se refería a persona porque cuando pensaba que solo era un linda chica su corazón le decía sobre algo mas ¿y si era un chico? Imposible, pero si fuera así no le molestaría ¿o sí? Guardo el papel confundido y por mucho de darle vueltas llego la conclusión de que estaba enamorado, muy enamorado, pero no sabía de quien, y su misión ahora era encontrar a su estrella.

Tú eres mi estrella. (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora