Text me, I miss you

XI.

Justin:

Me ha costado mucho abrir los ojos y escribir este mensaje ya que no he dormido nada y la luz me molesta bastante, y lo sé; tengo que dormir, pero nunca me dan ganas. Voy a recurrir a las pastillas para dormir. Es peligroso para mí, sin embargo, no tengo otra opción mas que usar medicamentos. También usaré antidepresivos o me volveré loco. Al día fumo dos y tres cajas de cigarrillos, me relajan y de vez en cuando me abren el apetito. No como demasiado, tan sólo desayuno y ceno, si tengo ánimos. He pasado días sin comer nada y aunque no me lo vayas a creer, no me da hambre.

No te preocupes por mí, estaré bien.

Respondiendo a tu mensaje... Lo siento, otra vez. Quería invitarte a la fiesta y que la pasaras junto a mí, pero como siempre, mi orgullo no me lo permitió. Me escribiste que nunca decepciono a nadie y no es cierto porque te he decepcionado y recientemente decepcioné a millones de personas que esperaban verme sobre el escenario. Soy una mierda. Me siento muy mal cada vez que leo tus mensajes puesto que hay cosas que me llegan, así como cuando fuiste a la fiesta aún sin yo haberte invitado y todo para estar conmigo y apoyarme... Verme feliz sobre el escenario. Nunca te vi en el concierto, supongo que te vestiste de otra manera y usaste una peluca para que no te reconociera. Quizás no deba escribir esto, pero... Tenías que enfrentarme esa noche, a pesar de todo el tiempo que pasó y lo que pasó entre nosotros. Y creo que odiaré a Scooter toda la vida por habérmelo ocultado... Bueno, él no tiene la culpa. Tú se lo pediste y respeto tu decisión.

Yo también quería, necesitaba y anhelaba verte.

De verdad lo siento mucho. Perdóname por no haberte invitado a esa fiesta. Tú hubieses sido la invitada más especial de todas e inclusive pensaba en cantarte, y no lo hice. Maldita sea, no lo hice. Era mi gran día y te dejé a un lado en un día tan importante para mí. Y es tan cierto lo que escribiste... Invité a personas que ni siquiera son mis verdaderos amigos. Oh Dios, nunca me perdonaré haberte roto el corazón. Mi culpa; siempre todo será mi culpa. Loreley, no me odies tanto, por favor. Yo jamás quise hacerte daño.

Y lo hiciste.

Desapareciste de mi vida para siempre y en el momento menos esperado. No volví a saber de ti y me dolió. Y me sigue doliendo. Todos los días lamento haberte ignorado, me arrepiento de no haber arreglado las cosas entre nosotros. Quise regresar, pero tú ya no estás aquí, dispuesta a dejarlo todo por mí.

Me merezco el infierno.

Texteame cuando me despiertes de esta horrible pesadilla, te jodidamente extraño. Yo te sigo queriendo como un condenado, nena.