Text me, I miss you

XVIII.

Justin:

He comprado los antidepresivos, no pude aguantarme, lo siento. Sé que son muy dañinos para mí, pero si nos los tomo voy a volverme loco. Literal. Ayer pude dormir más de seis horas, es un récord. En las últimas semanas sólo he podido dormir tres o cuatro horas al día, ya sabes, el insomnio es una mierda. Cuando me levanto en la madrugada me siento en el piano y compongo una canción para ti, aunque me cuesta mucho volver a cantar aunque cuando pienso en ti es tan diferente. La inspiración regresa a mí y es como si estuvieses a mi lado, otra vez. A través de la música te puedo sentir y eso me hace sentir muchísimo mejor. De alguna manera u otra, me reconforta.

Aún tengo esperanza.

Me importaba, Loreley. Realmente me importaba demasiado cuando te enojabas conmigo y no querías hablarme. A veces eras un poco rencorosa, no te lo voy a negar. En este mensaje me escribiste que ibas a seguir jodiéndome la vida hasta que respondiera tus mensajes, eso estoy haciendo, entonces... ¿Dónde estás? Quiero que me jodas la vida de la manera más hermosa, como siempre lo has hecho. Pierde tu orgullo una vez más y vuelve, por favor. Estoy esperando que regreses y no lo haces. Cantemos juntos tu canción favorita y bailemos bajo las estrellas, como siempre quisiste hacerlo.

Bailemos juntos y olvidemos todo.

Veamos nuevamente Cincuenta sombras de Grey, ríete de Ana que yo también lo haré y no pararé de reír en toda la película sólo para sacarte de quicio y abrazarte hasta que quites esa cara de enojada. Diré que soy muchísimo más guapo que el protagonista sólo para escucharte decir que tengo razón. Bromeando te diré que quiero hacer el papel de dominante y tener una sumisa, para que así tú me mires como si estuviese loco y me digas que eso no pasará nunca. Le pediré a Dios que me de una oportunidad para devolver el tiempo y arreglar las cosas. Prometo que no la desperdiciaré.

Todas las chicas con las que salí me dieron placer y un poco de diversión, pero nunca felicidad.

Tú me diste tanta felicidad. Y me tenías a tus pies.

Texteame cuando regreses de tu largo viaje en el cielo, te extraño. Llámame como quieras, mientras me digas que me quieres todo está bien para mí.

Posdata: Odiaba ese nombre pero escucharlo de ti era especial.