- ¡Eso fue tan bonito! - Exclama Nia dejando caer su mochila al suelo.
- Fue raro - Contradigo rodando los ojos.
- Hermanos a las tres en punto - Susurra Nia sonriente.
Giro mi cabeza hacia atrás y escucho como bufa.
- Esos son las tres y media. Mira al frente - Ordena negando con la cabeza.
Hago lo que ella dice y los veo a los tres.
- ¡Sky! - Exclama Alex abrazándome.
- Asi que profesora de Kai, ¿eh? - Me codeó Connor con una sonrisa pícara.
- ¿Lo sabéis? - Pregunto refiriéndome al beso.
- Kaidan entró furioso a casa y susurró "Maldita niña". Después de eso no lo hemos vuelto a ver hasta hoy - Explica Alex en mi oído.
Asiento frunciendo el ceño. ¿A dónde iría ayer después de salir de casa?
- Nos vemos luego chicas, mi clase no es esta - Dice Connor saliendo a paso rápido, junto con Kaidan, que no ha abierto la boca en estos minutos de conversación.
- Que no te extrañen los cambios de comportamiento de Kaidan - Dice Alex sonriendo.
- A este paso se acostumbrará rápido.
Fulmino con la mirada a Nia y bufo.
- No os confundáis, yo no quiero nada.
- Repítelo hasta que te lo creas.
- ¡Nia! - Reprocho rodando los ojos.
- Eres tú quien le besaste no yo - Se excusa riéndose con el hermano.
- Os odio - Refunfuño cruzándome de brazos.
- ¿Otra mentira, Sky? Ya van 2 en menos de 1 minuto - Dice Alex divertido abrazándome.
(...)
- Se avecinan tormentas Sky - Dice mi padre batiendo un huevo.
- No saldré de casa de todos modos - Me encojo de hombros.
Subo a mi habitación y miro el jardín delantero. Las gotas se empiezan a notar y los truenos nos avisan de que ya está por empezar.
Cierro la ventana al ver como el viento sopla así mojándome.
El timbre de casa me hace levantarme y frunzo el ceño. ¿Quién llama ahora al timbre con la tormenta de fuera?
Abro la puerta y abro los ojos como platos al ver a Kaidan mojado, con una mochila y tiritando de frío.
- Estoy li-listo para las cla-clases - Susurra tartamudeando.