- Necesito amigos - Murmuro llevando su plato a la mesa.
- ¿Amigos? - Frunce el ceño. - ¿Chicos?
- No Kaidan, extraterrestres - Ruedo los ojos.
- Chicos no, chicas si.
- ¿Eso que veo son celos?
- Claro que no - Bufa como si fuera obvio.
- Creo que conseguiré un amigo, un chico guapo.
- ¿Cómo?
- ¿Qué te parece el capitán de lacrosse? Si, definitivamente Chase está bastante bien - Digo sonriendo.
- Claro que no - Niega comiendo su plato de espaguetis.
- Es verdad, hay mejores. ¿Has visto al profesor de ciencias?
- ¿El mío? - Pregunta abriendo los ojos. - ¿El universitario?
- Si, creo que apostaré por él.
- No, no lo harás.
- Oh si. Mañana mismo iré a que me resuelva una duda.
Veo como aprieta el tenedor y sonrío consiguiendo mi objetivo.
Después de recoger su cena -ya que yo ya había cenado pizza- ambos estamos en la cocina. Yo recogiendo y él... Él está en su mundo.
Me acerco a él y apoyo los codos sobre la mesa recostándome un poco para ver su rostro.
- ¿Cuándo admitirás que estás celoso?
- Nunca, por que no lo estoy.
- Claro - Susurro sarcástica. - Ya te contaré como me va con el profesor.
- No hablarás con él.
- ¿Y eso por qué? - Pregunto. Lo tengo, dilo Black. Te pillé.
- Él es mayor para tí - Tartamudea confundido.
Acerco mi rostro al suyo alzando una ceja.
- Tu también.
- ¡Sólo un año!
- Él dos - Me encojo de hombros.
Vamos Black. Desembucha.
- ¿No es tarde? - Pregunta desviando la mirada.
Me separo con una sonrisa triunfante y suelto una risa.
- Cierto. Tengo que prepararme para mañana.
- No hablarás con él - Repite posicionándose detrás de mí.
- Yo creo que si. Hasta mañana Black.
Deposito un inocente beso en su mejilla y le guiño un ojo.
Eso ha sido divertido.
