Capítulo 4: La verdad

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Peter despierta, o llegaras tarde a la escuela... Peter, oye ya despierta.

- Oye... Ya callate. Le dije al oso, mientras me revolvía en las sabanas tratando de estirarme.

Oye pero no ves que son las 8:00 am

- Si... Pero no ves... Que hoy es sábado.

Oh... Bueno.

Me destape la sabana del rostro, para luego sentarme en el centro de la cama.

Vaya noche cierto. Dijo el oso, como tratando de buscar conversación.

- Si... tienes razón. Le dije seguido de un suspiro.

Y... Que es lo que vas a hacer.

- No lo se, y no empieces con las preguntas. Le dije amenazante.

Bueno si me vuelves a meter dentro del armario con chica mejor.

- ¿Que es lo que dices que dijiste?

Nada. Dijo el oso, poniendo cara de fingir demencia.

- Muy bien ya basta.

Me levante de la cama, yendo al baño para cepillar mis dientes y lavarme la cara.

Esta vez me aseguré de que nada ni nadie estuviera ahí para intentar ahogarme.

Pude hacer todo tranquilamente, salí de baño, baje para la cocina.

Pero como era fin de semana todos se levantan muy tarde.

Por suerte sabia como hacer el desayuno, así que sólo hice un poco.

Luego de comer, lave el plato y subí otra vez al cuarto.

Fui otra vez al baño, me di una buena ducha, para luego vestirme, y salir al callejón donde estaba ayer, tenia mucha curiosidad de que era el hoyo que estaba detrás de el contenedor.

Me coloque unos jeanes azules, una camisa azul, con una chaqueta verde por encima, con unos zapatos deportivos negros y por último una gorra gris.

Baje a la cocina, tome las llaves que estaban encima de la mesa, pero antes deje una nota en la puerta de la nevera.

Mamá, salí a comprar unas cosas para la casa, vuelvo después, en la mesa les deje a ti y a papá el desayuno en la mesa, los quiero mucho.

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