16. Cuando ganamos un poco de esperanza.

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Siempre fui consciente de que la vida como esposos no sería siempre miel sobre hojuelas, había sido testigo de grandes peleas en torno al trabajo y no tenía ningún antecedente en la familia que demostraba que un matrimonio podía ser estable, y para siempre, pero no hubo ningún momento dentro del tiempo que pasaba con Eliza en el que yo quisiera cambiar las cosas, estaba con ella y me gustaba, era feliz a su lado incluso cuando no lo era, había peleas pero ninguna lo suficientemente fuerte para hacerme huir. Dentro de los primeros dos meses las cosas fueron tranquilas, cada día era mejor que el otro y siempre nos encontrábamos tumbados el uno sobre el otro gritando nuestros nombres y algunos juramentos, habíamos asegurado que sin importar lo que pasara encontraríamos tiempo para pasar juntos y aunque en un principio nos resultó sencillo, las cosas con el tiempo comenzaron a complicarse.

Eliza pasó de ser "la nueva" o la "chica promesa" a ser una de las abogadas mas solicitadas del despacho, mis casos me habían sacado por días de la ciudad e incluso del país por algunas semanas haciendo que nuestra unión comenzara a decaer, cada vez pasábamos menos tiempo juntos y aunque cada segundo libre que nos permitíamos lo sabíamos aprovechar, los dos sabíamos que las cosas no estaban yendo como se suponía que debían, incluso aunque nos negábamos a admitirlo.

Después de varias semanas llenas de trabajo, finalmente me encuentro con un día libre, me despierto temprano para asistir a la oficina y cancelar todos mis pendientes para poder pasar el día con mi mujer antes de que ella se despierte, cuando llego me encuentro con Martín.

—¿Como va la vida de casado? -cuestiona y me encojo de hombros.

—Es una vida de trabajo diario hombre -admito y sonrío, —pero despertarme a su lado cada mañana, maldición, eso vale la pena -sus ojos se abren con sorpresa y asiente.

—Tienes la misma mirada de idiota que cuando me hablaste de ella la primera vez hombre, no sé si tengo pena o envidia de ti -suelto una carcajada y paso la mano por mi barbilla encogiéndome de hombros.

—Creeme hombre, deberías de envidiarme -aseguro y rueda sus ojos entendiendo mi mensaje.

—No quieres ir allí hombre, no quieres ir allí -asegura y asiento estando de acuerdo mientras caminamos hasta mi oficina, —así que... ¿que planes tienes hoy? -cuestiona cerrando la puerta y niego.

—Terminar todo pronto para poder pasar un día de calidad con el amor de mi vida -aseguro haciéndolo bufar.

—¿Cuando vas a tener tiempo para mi hombre?, ¿que pasó con los amigos? -sacudo la cabeza.

—Después de que tenga tiempo para mi mujer -afirmo y niega, arrebata mi celular de mis manos y lo mete a su bolsillo.

—Nada de eso, nos vamos a desayunar y en busca de tus bolas hombre -se burla y gruño, pero no protesto porque un tiempo de hombres no parece tan mala idea.

"Una copa solamente" había pasado a una segunda, a una tercera, una cuarta y despues a comenzar de nuevo ante la perdida de la cuenta, habíamos pedido una ronda de tragos y un par de hombres se habían unido a nosotros a compartir sus burlas ante mi nuevo estado de matrimonio.

—Estás jodido hombre, tu vida acaba de joderse -murmura uno de ellos, el mayor y quien tiene 23 años con su esposa, sacudo la cabeza.

—No, no lo estoy -afirmo y ellos ríen.

—Realmente eres nuevo en esto ¿no? -cuestiona y se miran unos con otros, yo miro a Martín que me mira igual de confundido, —la pesadilla apenas está por comenzar -se burla y niego, —¿Cuanto tienes de casado? ¿un par de meses? -abro la boca para decir la cantidad pero solo la cierro al encontrarme sin saber que es, —¿hay mucho sexo? ¿ella cocina? ¿todo parece un sueño?, bueno hombre, en cualquier momento despertarás y ella tendrá la baba regada por toda su cara, intentaras besarla pero te alejará, querrás estar con ella pero ella solo te gritara y en menos de un año te darás cuenta de que haberte casado fue la peor decisión que pudiste tomar -asegura y todos alzan sus copas en acuerdo, dejo salir una exhalación y me pongo de pie.

BRANDONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora