HOY, MAÑANA Y SIEMPRE.

Capitulo 1

UNO

Mis padres se separaron cuando yo tenía 5 años y he vivido siempre con mi madre y pocas veces veía a mi padre. Ahora tengo que empezar una nueva vida, con él, con Andrea la nueva pareja de mi padre y Andrew el hijo de Andrea.

No tengo relación con ellos, mi padre solía venir a casa a verme y tampoco he tenido el interés de hacerlo.

Estoy nerviosa una nueva vida lejos de casa y sin conocer a nadie o quizá nerviosa por el avión, nunca he montado y no me extrañaría que me marease o algo por el estilo. Ya he dejado mis maletas y me dispongo a subir. Me siento en el pasillo, por no mirar por la ventana. Al lado de mí se sienta una mujer de unos 40 años. Se le ve muy reservada y a la vez nerviosa, es morena con ojos verdes, nariz pequeña y cejas grandes.

Me ha ofrecido una agradable sonrisa y yo le respondo con el mismo gesto.

- Es la primera vez que montas- me pregunta.

- Sí, estoy un poco nerviosa- le respondo.

-Se nota, tú tranquila luego iras muy cómoda.

-Lo intentare- la respondí

Al final el despegue no estuvo tan mal, aunque se me pusieron los pelos de punta.

Rato después una azafata aparece con un carrito de canapés, cojo uno, tiene una sabor agridulce más dulce que agrio pero esta delicioso. La señora de al lado duerme, quiero seguir hablando con ella, a si que me dispongo a toser fuerte para que se despierte.

Al final sucede, ella abre los ojos poco a poco e inmediatamente se dirige hacia mí. Yo la sonrió pero ella bosteza, un bostezo tan grande que la boca de un león.

- Soy Olivia- me presento acercándole mi mano

Ella se ríe - Encantada yo me llamo María

-¿Eres Española?

-Sí,¿ no se nota?

-Pues tienes buen acento ingles

-He vivido mucho años en los Ángeles, llevo 20 años viviendo allí

De repente habla una voz por los megáfonos del avión diciendo que vamos a terriza dentro de unos minutos. María se despide de mí, me pongo triste me había caído muy bien y encima había sido mi compañera de viaje pero ahora tenía que aceptar la realidad.

Bajo del avión y me estaba esperando Nany. Nany ha sido la nana de mi padre desde que era pequeño y me cuido hasta los 5 años, aunque me costó reconocerla, esa mirada dulce y esos hoyuelos cuando sonríe nunca se olvidan.

La abrace muy fuerte, tanto que creo que la deje sin respiración

- Mi niña, que grande estas y que guapa te has puesto - me dijo emocionada

-Nany cuanto tiempo no has cambiado nada- eche un vistazo y veo que viene sola y le pregunte sobre papa.

-¿Donde está papa?

- Se ha quedado en casa, ya sabes cómo es tu padre, venga el taxi nos espera.

Nos dirigimos al taxi para subir, mientras Nany me hablaba y no le prestaba atención yo le seguía dándole vueltas el porqué papa no había venido ni a recogerme, me hubiera gustado que lo hubiera hecho, seria un bonito gesto por su parte.

-Olivia ¿estás bien? No me estas prestando atención

- Perdón Nany , estaba pensando en mis cosas, que decías

-Ya veo ya, te decía que, que tal el avión y el viaje.

-Mejor de lo que creía la verdad

Cuando ya me querido dar cuenta llego a casa de papa, bueno mi hogar ahora, es un chalet bastante grande con fachada de piedra, muchos arbustos y una gran piscina.

Cuando me dispongo a bajar del taxi me tropiezo, pero gracias a una mano logro no tropezarme es la de papa. Mi padre es alto moreno, ojos castaños y nariz grande, y tiene un carácter muy peculiar.

-Estas bien Olivia, que guapa estas me alegro de verte.

-Si gracias papa- le contesto fría y distante será por no haber ido a por mí o por la confianza que no tenemos que casi completamente es un desconocido para mí.

A mi alrededor veo a una chica alta de 1.70 rubia, ojos oscuros y muy grandes y una sonrisa demasiado inquietante, supuse que era Andrea. Y su lado estaba Andrew seria de mi edad, alto de 1.75 ,bastante guapo la verdad, moreno ojos azules verdosos y una sonrisa que si te quedabas mirándola fijamente te hipnotizaba, vestía bastante bien y me fije que tenía unos cuantos tatuajes.

-Olivia estos son Andrea y Andrew, tu nueva familia

Eso de la nueva familia me sonó hasta mal, a sí que no le di bastante importancia.

-Encantada- respondí

Andrea me hizo un gesto con la mano, me sonrió y me guiño el ojo. Andrew me dio dos besos, cuando me los dio sentí un olor suavemente dulce e intenso. Me dio un escalofrió, nunca había olido nada igual.

Nos dirigimos a entrar a casa, Nany me llevo a mi habitación.

-Intentado ordenar algunas cosas pero no sabía cual eran tus gustos habrás cambiado tanto a aquella niña de 5 años.

Le echo una sonrisa- Gracias Nany, ya me organizare tengo que colocar muchas cosas.

-Bueno te dejo sola para que te organices cuando estés lista me avisas.

Me dispongo a sacar cosas, pero empiezo a llorar y me digo a mi misma mi vida de hoy, mañana y siempre.