Capítulo 8

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Eran las 08:00 de la mañana, hora en que los alumnos estaban ingresando a la salas de clases para tomar asiendo y colocar atención al maestro.

En cierto lugar había dos amantes acostados abrazados en una cama matrimonial, uno yacía despierto dándole besos en el cuello a su acompañante que estaba dormido...

Carlos observaba el cuerpo que tenía entre sus brazos que sin poder contenerse, le besa y succiona esa piel de porcelana, dejándole una que otra marca de propiedad. Sin darse cuenta bello durmiente está despertando por las atenciones que este le da.

El azabache al percibir las atenciones de su acompañante se despierta no recordando nada de lo sucedido el día anterior. Hace el esfuerzo de recordar aunque sea una mínima cosa, pero no se esperaba que cuando sus memorias llegaran a su mente lo asustara y se parase de inmediato de la cama desconcertado a su pareja.

Demian

Mi mente estaba hecha un lío por las escenas traumáticas de lo sucedido de ayer, no sabía en qué lugar me encontraba eso me provocaba que no parara de temblar de terror.

Siento que me abrazan acariciando mi espalda y susurrando a mi oído palabras me tranquilizaron haciéndome sentir seguro -Pequeño relájate yo estoy contigo, nada malo te pasará-le besa la frente.

-C-Carlos- se larga a llorar su pecho

-Ya bebe, ya todo lo malo pasó.

-M-me siento asqueado, tocaron todo mi cuerpo. Fui un débil al no saber defenderme

-Eran tres contra uno, y además tú eres un doncel y ellos son varones. No te culpes a ti mismo, soy yo el que tuvo la culpa al no saber cuidarte como se debería. Perdóname amor.

Negué con la cabeza- No es tu culpa, no es de nadie, ya que ninguno de los dos sabía que pasaría esto-dije para luego mirar a los ojos al pelirrojo que me mostraba una expresión de ternura.

-Eres lo mejor que me ha pasado en mi vida, y no dejaré que te vallas de ella- me sonrojo.

-Te qu-quiero, gracias por ir a salvarme

El pelirrojo suelta una risita- Y yo a ti gatito.

-Te aguanto que me digas "pequeño" o "bebé" pero "gatito" no tomate- frunzo el ceño

Este se ríe y me besa la mejilla- Venga, vayamos a la cama hace frío, si no te has dado cuenta los dos estamos en ropas interiores

Ahora que lo menciona recién percibo que ando con bóxer. Se me sube los colores a la cara, lo empujo para acostarme rápidamente y cubrir mi cuerpo con las sabanas.

-No me digas que recién te diste cuenta-sonríe y se acomoda al lado mío abrazándome por la cintura, quedando pegado a su formado pecho. Nos quedamos en silencio escuchando la respiración de cada uno. La inquietud y culpa me corroe por lo que el pelirrojo se da cuenta

-¿Qué te sucede?

-Lo que pasa es que hoy faltamos a clases perdón por eso. Sé que es mi culpa que tú no hubieras asistido. Además ¿en dónde estamos?

-No me importa asistir, mi prioridad eres tú. Y respondiendo a tu pregunta, estamos en mi departamento- besa mi cabeza- ahora descansa un rato más

Me deje llevar por la calidez que desprendía su cuerpo, poco a poco mis párpados se cerraron hasta quedar profundamente dormido en sus brazos.

Al despertar estaba sólo en la habitación, buscó con la mirada al pelirrojo pero no le encuentro. Decidí levantarme para ducharme, entre a una puerta suponiendo que sería el baño que al final resultó serlo.

"Me perdiste y ahora soy feliz sin ti."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora