I'm just another monster too. ~Carl Grimes.

Salvadores.

Narrador Omnisciente.

Carl sostuvo el papel entre sus manos, la frase escrita por Enid estaba poniéndolo cada vez más nervioso, de verdad esperaba que no se haya ido. Suspiró con rabia, odiaba la idea de confundirse.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por una conversación. Dudó por un momento en acercarse, aquella voz que se oía le era inconfundible. Volvió a suspirar. Cuando se trataba de estar cerca de ____, su corazón se aceleraba.

Se odiaba a sí mismo por dejarse confundir. Sin percatarse arrugó el papel.

Se aseguró que su hermana siguiera durmiendo, entonces se levantó de su lado y caminó por el pasillo en silencio. Las voces comenzaban a escucharse más claras, temiendo que lo pillaran; se afirmó contra una pared.

– ¿Y los demás? –preguntó ____, buscando en los rostros de sus amigos alguna respuesta–. ¿Dónde están?

Su aspecto serio solo ocultaba como realmente se sentía; la inquietud y el temor se mezclaban dentro de ella. Carl asomó su cabeza, queriendo observar con sus propios ojos lo que sucedía, vio a ____ parada en medio de la sala mientras que los otros cuatro chicos estaban sentados en diferentes partes.

Deprisa el castaño volvió a esconderse, con el corazón a punto de salir de su cuerpo; puesto a que uno de ellos casi lo había pillado.

El castaño agudizó su oído cuando oyó que alguien hablaba.

– Tanner... Graham y Ryder... –la voz de Brayden se oía dolida. Le era difícil decir en voz alta que sus amigos estaban muertos–. Ellos... no lo lograron.

La chica intentó no mostrar alguna reacción, permaneció con su semblante serio pero no logró impedir que la angustia la recorriera por dentro. Se estaba volviendo costumbre perder a un amigo. Todos ahí sabían que ya no eran los mismos, antes ninguno hubiera muerto, antes no estarían conviviendo con el enemigo, antes todo era distinto.

– Hay que irnos, no debemos estar aquí. Esta no es nuestra gente –Eric tomó la palabra con dureza, luego de un rato de silencio y con sus ojos únicamente puestos en los de ____. Carl sintió como su respiración se trancaba–. Wesley está en peligro y debemos asegurarnos a que esté a salvo.

En otro momento a ____ le hubiera gustado tomar sus cosas y largarse. Pero ahora los planes habían cambiado, y aunque le era difícil de aceptar, sus sentimientos también lo habían hecho.

– No te preocupes mucho por Wesley. Si lo comparamos con nosotros, es quien más seguro se encuentra –les declaró la castaña. Sin notar la incertidumbre que tenían sus amigos al escucharla.

– ¿Cómo sabes eso? En ningún momento te hemos contado lo que sucedió con Wesley –se adelantó Shawn a preguntar y Collin que estaba junto él, volteo a verla–. ¿Qué es lo que no nos has dicho ____?

Carl que aún seguía detrás de la pared, se sentía tan confundido como los otros pero aun así, sin entender mucho de lo que decían, algo le dijo que debía quedarse a oírlos.

En seguida un sonido extraño llamó la atención de Carl, inconscientemente desvió su mirada hacia Judith. Su hermana se hallaba despierta, y sus pequeños ojos lo miraban con impaciencia. Movía sus manos en dirección a él, queriendo que la alzaran y tomaran en brazos. Carl aterrado, le hizo señas de silencio al ver que el llanto se aproximaba.

En la sala, ____ se encontraba bajo la atenta mirada de unos serios chicos, que por derecho exigían saber lo que ocurría.

– Vienen hacia acá –fue lo único que pudo pronunciar, pero al ver que no le habían entendido añadió–. Nos adueñaremos de Alexandria.