No hacia más de dos días que vi a Ángel con su novio pidiendo flores en la floristería, me vieron, pero ni me saludaron ni nada. Cuando volvía a casa vi la furgoneta en la cual se había subido Aaron anteriormente para irse de gira. No dudé en ir corriendo pero, al llamar a la puerta, Aaron abrió y me dijo que me marchase, cerrando de nuevo.
Volví a casa llorando en silencio, preguntándome qué diablos pasaba. Nada tenia sentido ya, mis mejores amigos me han dado la espalda, Yato murió y Dylan está demasiado ocupado con su guitarra... Y mis bisabuelos aún no han vuelto.
También he de decir que hace un tiempo que no veía a Relámpago. Sólo encontré un pergamino que no podía entender.
En cuanto entré por la puerta, grité, dolida, confusa y llena de rabia. Estaba sola. Al momento, oí que llamaron al timbre, así que me sequé las lágrimas, me erguí y abrí.
Era Dylan, habría oído mi grito y se acercó a ver
-¡Lisa!... Va...¿va todo bien?-me preguntó preocupado
-Si...¿¡por qué no iba a ir todo bien!?-Dije con sarcasmo
-Ey...Puedes contármelo
-No lo entenderías...¡Un chico de ciudad jamás entendería lo que me pasa!-grité furiosa
Dylan no lo dudó más. Me agarro con una mano ambas manos mías, las puso sobre mi cabeza, avanzó hasta acorralarme y dejarme apoyada contra la pared y me besó.
Yo quería separarme, pero no podía, mi cuerpo no reaccionaba.
Sus cálidos y tiernos besos me calmaron. Él empezó a soltar el agarre y yo fui bajando las manos hasta ponerlas en sus brazos.
Cerré los ojos completamente sonrojada y seguí el beso.
Me traía muchos recuerdos, pero, a decir verdad, me gustaban esos besos y esos recuerdos, formaban parte de mi. Lo único que me resultó extraño es que Dylan me besase así porque sí... Debía querer que me callase y esa fue la única forma porque sino...¿se habría enamorado de una chica con tantos problemas emocionales?
ESTÁS LEYENDO
Aventura Sobre Herraduras
AcakUna chica humilde de un pueblo y sus dos amigos pasan aventuras juntos. Ellos dos se separan de la chica y ella se ve obligada a buscar su pasión, cuando un animal negro, elegante, aparece delante de ella. A partir del encuentro, nada volverá a ser...