London Adventures - Fanfic Harry Styles (& One Direction) Versión en Castellano

CAPÍTULO 7 - Bipolar

Las chicas ya no estaban en la habitación, y sus cosas tampoco, así que cogí mi bolso y mi ropa y bajé las escaleras alisándome el pelo con el cepillo que me había dado Louis (ya sin el pelo rubio que había encontrado).

Irina y Bianca estaban en el sofá entre Niall y Liam mirando a Zayn, que estaba de pie a su lado hablando por teléfono.

- Es el cerrajero - me dijo Bianca bajito y apuntando a Zayn.

Asentí y fui hacia la cocina, donde estaba Louis literalmente montado encima de Harry a caballito e intentando quitarle el reloj. Niños, pensé.

- Harry, ¡dámelo ya! - gritaba Louis desde la espalda del otro.

- Que no, ¡pesado! - le respondió el otro.

- Pero es que si tanto te gusta, ¡cómprate uno! - volvió a gritar Lou.

- Nah, es mejor si es tuyo - vaciló Harry.

- Me rindo - dijo Louis bajándose del otro y sentándose a mi lado en los taburetes.

Acabé de peinarme y le tendí el cepillo a Harry, que estuvo unos segundos alternando miradas entre el cepillo y yo con cara ágria. ¿Tendría que ver con el pelo? Lo sabía.

- ¿De dónde has sacado eso? - me preguntó casi enfadado.

- Tío, se lo he dado yo. Estaba buscando MI reloj y me ha preguntado si tenía alguno. Estaba en un cajón y se lo he dado - intervino Louis, viendo cómo se estaba poniendo el moreno.

- Perdona, no sabía que no podía usarlo. Ten - dije, y se lo dejé en el mármol.

- Pues la próxima vez que quieras algo me lo preguntas a mí - dijo Harry super borde.

Aún sin saber cómo, le había enfadado. Siempre me metía en líos, además, ¿de quién era el cepillo? Me moría de curiosidad, pero era esa curiosidad morbosa que sabes que te puede hacer daño y aun así la tienes igual.

- Perdo.. - empezé a decir, pero Louis me cortó.

- ¡Eh! He dicho que se lo he dado yo. Pero ¿qué te pasa? Estás muy tonto.

- No quiero que Gabri use este cepillo, ¡y ya! Era de... de nadie. Dejémoslo, ¿vale? - y se fue enfadado con el cepillo en la mano.

Louis esperó a que Harry se hubiera ido del todo y se giró para mirarme.

- Este chico cada día está peor. Voy a ver qué le pasa. No te preocupes, ¿vale? - dijo, y se fue tras el otro.

Gracias a los cielos apareció Irina por la puerta de la cocina, evitando que me comiera la olla por lo que acababa de pasar (al menos por un rato).

- Gabri, ya hemos llamado al cerrajero. Nos espera en media hora en casa, así que deberíamos ir tirando. Liam dice que nos lleva - dijo, y las dos salimos al salón.

Louis, Harry y Niall se quedaron en casa de los dos primeros, y Liam y Zayn nos llevaron a la nuestra. A la hora de despedirnos todo había sido súmamente raro. Niall e Irina casi no se podían mirar a la cara debido al incidente del baño, y Harry tenía una actitud muy rígida, que me hacía sentir mal, a pesar del encogimiento de ombros de Louis en mi dirección como diciendo "olvídalo". Estaba claro que no iba a olvidarlo. No quería pensar en ello, pero la imagen de una chica rubia guapísima saliendo de la habitación de Harry llevando SÓLO su camiseta me mataba. Y yo siempre me había caracterizado por darle demasiadas vueltas a las cosas. Aun así nos despedimos y dimos los dos besos reglamentarios.

La única que salió contenta y feliz como una perdiz de esa casa fue Bianca, que había quedado con Louis al día siguiente para un café. Todo esto era muy surreal. ¿Ahora éramos amigas de One Direction? Oye, ¡ni que fuera un fan fiction!