Limpiaba el suelo de la florería con un poco de melancolía en mi. Era viernes y vine aquí al no tener nada mas que hacer. Meiko terminaba de vender algunas semillas.
Ya casi me había acostumbrado a que Luka no estuviera presente. Pero igual sentía su ausencia.
Me llamaba cada vez que podía, informándome del estado de su padre y de su estadía allí. Debido a nuestra escasez económica (Es decir, al reciente evento de la Teiko) ella casi no podía realizar llamadas hacia aquí, ya que era una llamada internacional.
De la escuela no tengo mucho para contar, salvo que habían comenzado algunos exámenes. Si, cuando Luka se va comienzan los exámenes y yo comienzo a sufrir. Claro, como Luka no esta Meiko se encarga de mis estudios, y ella es peor que Luka con ese tema.
Últimamente e intentado alejarme de "Ellas", de los problemas e intentando no escapar de clases, ya que Luka no estaría para cubrirme con los directivos y con mis padres y hermano.
Sobre aquel rubio no e sabido nada, salvo que ahora que conoce a Hetare suele ir a llevarle comida o ir durante los periodos libres. Cuando yo estoy.
No cruzamos palabras, no nos miramos, pero sin embargo, el solo sentir la presencia de alguien mas allí arriba me hace feliz. Aunque sea un idiota al cual odio por despreciarme como soy.
Pero, fuera de la azotea, era otra cosa. Cuando veía que "Ellas" me golpeaban me ignoraba totalmente, tal como le había pedido.
También, Kaito y Teto me presentaron a aun compañero suyo: Fukase. Un chico bastante incomprendido y cerrado. Tal como me describieron los chicos, "Raro".
Volviendo a al tema de Luka, el estado de su padre dijo que no parecía ser tan grave como lo describió su madre. Pero que el estaba feliz de verla.
En una de las veces en las que Luka me llamó, se encontraba con su padre en la habitación del hospital. Su madre y hermano habían salido. Me pasó para hablar con el, me dijo que Luka le había mostrado algunas fotos de mi y que había crecido mucho, me dijo que me había vuelto mas bonita de lo que ya era y que aun podía observar esa chispa en mis ojos, aquella chispa de la que el siempre me habló "Esa chispa que tienen tus ojos, esa felicidad de querer vivir, se lo que pasaste, pero aun así estas feliz de estar viva. No debes de ocultarla " Aunque la ocultase, el aun la podía ver.
Sonreí inconscientemente.
-Parece que alguien anda algo distraída últimamente-. Una voz me sacó de mis pensamientos
Era Meiko, quien estaba despidiendo al cliente que había atendido hace minutos atrás. Lily estaba afuera de la tienda hablando por teléfono.
-Si, no me termino de acostumbrar a que Luka no este en casa. Ahora yo debo de hacerme la cena-. Dije apoyando todo mi peso en la escoba con la cual limpiaba
-Tu sabes que puedes quedarte aquí en mi casa cuando lo desees, solo dime-. Dijo y yo negué
-No te preocupes, estoy bien, tampoco quemaría la cocina-. Dije irónica
En ese momento entró Lily algo preocupada a la tienda.
-¿Lily? ¿A sucedido algo?-. Preguntó Meiko
-S-Si, pues debo hacer unos cuantos papeleos sobre mi esposo y no tengo quien cuide a Rinto mañana ya que su hermano estará ocupado durante el dia-. Dijo rápido, dando a entender solo una cosa, que no tiene quien cuide a Rinto
-Me encantaría cuidar al pequeño, pero debo viajar esta noche a por unas plantas de encomienda que enviaron a la ciudad vecina por error-. Dijo Meiko
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Mi tierna otaku.
Fanfic-Porque si piensas en mí, quiero que me recuerdes con una sonrisa. Otaku, es el nombre dado a los fanáticos del anime. La sociedad acostumbra a criticar, marginar y rechazar a estas personas por sus gustos. Claro, puede que a ellos no les importe mu...
