Mi tierna otaku.

Capítulo 9: Fuerte

Decidí no atormentarme mas con eso y solo limitarme a seguir mi vida normalmente. Siendo fuerte.

Aquellos recuerdos aun permanecían en mi mente, no importaba cuanto me esmerase en borrarlo, no lo hacia. Y aun aumentaban.

Recordé mucho mas sobre mi infancia, y me dí cuenta de porqué decidí borrar mis recuerdos. Todos los recuerdos sucedidos antes de "Aquello".

Con respecto a la escuela, pues me e tenido que acostumbrar a que Gumi, una persona a la cual yo consideraba mi amiga, me golpease junto con Miku y Neru. Aunque, aun así, dolía, dolía que a quien considerabas de tu lado, te tratase de forma tan cruel.

Estaba un rato con Hetare, el próximo receso sería el almuerzo, así que igual quería pasarlo con ella.

-Me pregunto si tenias un nombre antes de que yo te encontrase-. Dije observando el canario amarillo que se encontraba sobre mi dedo indice.

Con respecto al tema de aquel estúpido rubio, escuché que terminó con Gumi y se hicieron amigos. Algo muy predecible para mi.

En otro tema, mañana sería la Teiko. Iría, sola. Es una obligación, lo hago por el.

Como recordé mas cosas, la persona que me llevó por primera vez allí. Por el, quien cambió toda mi forma de pensar y ver el mundo.

El timbre de vuelta al salón llamó mi atención, haciendo que devolviese a Hetare en su jaula.

-Volveré a la hora del almuerzo. Hoy Luka hizo arroz con tomate y carne-. Dije mientras salía de la azotea. 

En estos dos días, no e recibido tantos golpes o daño por parte de ellas...

caminé por los pasillos, dirigiéndome especialmente a mi salón, tenía clases de biología.

Al llegar al salón, la profesora aun no llegaba, y debía sentarme en mi lugar. Al lado de la persona que mas odio.

Al llegar a mi lugar, el ya se encontraba allí. Hablando con Mikuo, el que se encontraba apoyado en la mesa de Len.

Me senté en silencio, intentando no llamar la atención de nadie. Lo cual era obvio, pues no le interesaba a nadie.

~*~

Una vez que la clase de biología terminó, me levanté de mi silla y busqué en mi mochila el recipiente que contenía mi comida. Una vez que lo encontré, cerré mi mochila.

Todo el salón, todos se habían ido con su grupo a almorzar. Solo quedaba yo.

Bajé mi cabeza y salí del salón.

-¡Rin!-. Me llamaron a mis espaldas. Giré y era Luka .-Lamento decirte que hoy llegaré tarde a casa, debo hacer un trabajo en casa de Teto-.

-No te preocupes, igual hoy no tengo que trabajar-. Dije sonriendo

-¿Almorzarás con nosotros?-. Preguntó Luka señalando el almuerzo que ella me había preparado

-No, iré con Hetare. Le prometí llevarle comida-. Dije riendo nerviosa y bajando la mirada

-Si que amas a esa ave-. Dijo

-Me recuerda a mi, solo que yo fui salvada por ti-. Dije mientras miraba a Luka fijamente

Ella sonrió y despeinó mi cabello.

-Esta bien, ve. Te veré en casa. No llegues tan tarde y no me esperes-. Dijo y se fui corriendo

Suspiré, debía ir a la azotea.

Caminé durante unos minutos. Estaba subiendo los últimos escalones cuando sentí un mal presentimiento. Lo ignoré cuando ya estaba frente a la puerta de la azotea.