La primera semana de Hogwarts con Umbridge como directora fue... decir desastrosa es poco.
La brigada inquisitorial había dejado a todas las casas a sin puntos, menos a Slytherin claro.
Peeves le hacían la vida imposible a Umbridge de todas las maneras posibles.
El tercer día Fred y George habían abandonado Hogwarts, con una gran salida. Todavia Umbridge no habia podido sacar el pantano que habia en el quinto piso.
Y, lo que mantenía a Harry como un muñeco de trapo sin vida, Potter no habia podido hablar con Severus en toda la semana.
Lo habia intentado de todas las maneras posible. Le habia mandado cartas, pero el no las había respondido; lo habia esperado fuera del salón de pociones, pero no salía y mantenía la puerta cerrada con llave; había ido a su despacho, tocado la puerta, y esperado hasta tardías horas de la madrugada, pero nunca le había abierto; había intentado quedarse hasta que el salon quedará vacío de alumnos, pero siempre que veía que Harry intentaba hacer eso, huía del aula; todo.
Harry llegó a duras penas a la segunda semana, durmiendo menos de 3 horas al día y bastante atrasado en su tarea de... de todas las materias.
El martes, Ron, Hermione y Draco, hartos de verlo deprimido, le propusieron algo.
-Potty, es hora de hablar.-Harry levantó la cabeza distraidamente, apartando el libro que habia estado intentando (sin exito) leer.
Vio que frente a el estaban Malfoy, Weasley y Granger.
Aquello le sorprendió. Casi nadie conocía aquel rincón de la biblioteca... aunque claro, Hermione conocía cada rincón de aquel lugar.
-¿hablar? ¿de que?-pregunto Harry, todavia sin prestarles mucha atención, perdido en su dolor.
-ya sabes de que, Harry.-Potter se concentro en el ceño fruncido de Hermione, intentando que su mente encontrará una respuesta razonable.
-por Merlin.-se quejo Malfoy.-de mi padrino, Potty, de mi padrino.
Harry hizo una mueca, como si le hubieran dado un golpe.
-¿que pasa con él?-Harry no podia ni pronunciar su nombre. Era imprecionante que hubiera podido acudir a clase de pociones esos días.
-vale, entendemos que el esta furioso contigo.-comenzo Hermione.-pero ¿te parece sensato rendirte tan fácilmente?
-no me rendí.-Harry se encogio de hombros y se concentro en no llorar.-el no quiere hablar conmigo. Y tu sabes perfectamente que lo intente.
-si, pero es lógico que el esté enojado. Le mentiste.-le recordo Hermione y Harry hizo otra mueca. Parpadeo varias veces para ayudarse a no llorar.
-bueno...-Draco interrumpio antes de que el ojiverde comenzará a llorar.-lo que venimos a proponerte,-dijo, mientras le lanzaba una mirada asesina a Hermione.-es una oportunidad de que hables con él.
La cara de Harry paso por varios estados de ánimo en segundos. Ilucion; dolor; esperanza; fracaso.
-¿como?-pregunto, desconfiado.
-si prometes comer como una persona normal, dormir como una persona normal... y lavarte los dientes con la regularidad de una persona normal, te lo contaremos.-Draco sonrio de lado.
Harry sopesa la idea.
-vale.-acepto.-¿de que se trata?
Draco no disimulo una gran sonrisa de satisfacción.
-.-.-.-.-.-.-.-.Harry se removía nervioso en su asiento mientras los demás alumnos abandonaban en salón de pociones.
Severus lo mirada de reojo, receloso, mientras le contestaba de mala gana a Draco algunas dudas.
Estaba muy enojado con el chico, pero no al mismo nivel que con Potter.
Cuando en el salón sólo quedaban ellos tres, Malfoy dio una excusa tonta y salio, cerrando la puerta detrás de si.
Severus se apresuro a juntar sus cosas, ignorando a Potter. A tal grado llevaba acabo aquella acción que no se dio cuenta de que Harry se habia parado y estaba esperandolo junto al escritorio.
Cuando levanto la mirada y vio al chico, dio un respingo de sorpresa.
Todavia necesitaba de toda su concentración para ocultar su dolor en frente del chico.
-¿podemos hablar?-pregunto Harry, y Severus se levanto.
-Lo lamento, Potter. Tengo... cosas que hacer.-Severus se dirigio a la puerta y trato de abrirla. Cerrada.
La miro frunciendo el ceño, y luego miro a Harry.
El chico presentaba una visión que le rompía el corazón en pedacitos a Severus. El labio inferior le temblaba, y sus ojos color esmeralda estaban brillantes por las lagrimas que se acumulaban en ellos. Apretaba las manos contra el cuerpo para que no le temblarán. No queria demostrar que estaba aterrado por lo que podría pasar allí.
-lo lamento, Draco la cerró.-dijo Potter con voz temblorosa. Harry no se atrevía a mirarlo.
Severus tampoco lo miraba. Estaba plantado junto a la puerta, mirándose los pies. No dudaba que pudiera abrir la puerta con una hechizo pero...
-¿de que quieres hablar? ¿vas a explicarmelo?-la voz de Severus revozaba de amargura.
Harry trago saliva.
-es lo que intento hacer desde hace dos semanas.-dijo Harry en poco más que un susurro, pero Severus lo escucho.
-bien.-dijo con lentitud.-pues explicamelo.
Harry lo miro. Tuvo que parpadear repetidas veces para aclarar su vista.
Severus también lo miraba.
Y Harry no tenia idea de que decir. Ni siquiera había pensado en la posibilidad de que aquello fin funcionará. No se habia permitido tener esperanza.
Y claro que no habia pensado en que rayos iba a decirle, como se lo iba a explicar...
-yo...esto...-Harry comenzó a hablar, no muy seguro de que decir, y fuera se escucharon murmullos. Habian llegado los alumnos de la siguiente clase.
Se miraron por un segundo.
-puedo explicarte lo esta noche.
Severus, contra toda posibilidad, asintio levemente.
-esta bien. Esta noche.
Harry tambien asintio se dirigio a la puerta y dio tres golpecitos para hacerle saber a Draco que debia quitar el hechizo.
El rubio así lo hizo, y Harry abrió la puerta.
-gracias... profesor.-dijo Harry, antes de salir. Sus ojos brillaban de esperanza.
Comenzo a caminar por el pasillo, y Draco lo siguio.
-¿Y?-pregunto el ojigris, aunque ya sabia la respuesta. Todo Harry se estaba delatando.
Harry ensancha más su sonrisa.
Luego de casi dos semanas comenzaba a sentir que algo estaba bien...
Aunque aquello no duro mucho.
-.-.-.-.-.-.-
Harry tocó la puerta del despacho de Umbridge, y poco despues escucho la voz de la mujer diciéndole que pase.
Cuando Harry entro, la gran sonrisa de la mujer lo hizo preocuparse.
-¿quería verme, profesora?-pregunto, inseguro.
-si, Potter. Sientese, por favor.-hizo un exagerado ademán para indicarle el asiento en frente de ella. A Harry aquella silla lo ponía incómodo luego de tantas horas de castigos.
-¿en que puedo ayudarla, profesora?-dijo Harry con cautela.
-ya hablaremos de eso, Potter. Pero ahora, insisto en que bebamos algo. ¿que prefiere? ¿jugo de calabaza? ¿cerveza de mantequilla? ¿café? ¿té?
-este...-Harry vaciló.-estoy bien.
-insisto, ¿que quiere beber? Quiza ¿chocolate?
Harry volvio a vacilar.
-Té esta bien.
-excelente.-Harry odiaba aquella horripilante sonrisa que tenia Umbridge.
La mujer preparo té para ambos.
-¿quiere leche?-le pregunto, y Harry asintio levemente, hecho un manojo de nervios.
Sabia que probablemente le pondría Veritaserum al té. Pero Severus habia dicho que nunca le daría verdadero Veritaserum... y no lo haría ¿verdad?
Umbridge le puso la taza delante.
-¿de que quiere que hablemos, profesora?- pregunto Harry, sin tocar su taza.
-ahora va, Potter. Primero ¿por qué no tomas un poco de té?
Harry sabia que seria inútil resistirse, así que tras un momento de vacilar, se llevó la taza al rostro y se mojo los labios, simulando que bebía.
La sonrisa de Umbridge de ensancho.
-no dudo que sabes que eso tiene Veritaserum.-Harry ni siquiera se molesto en fingir inocencia.-aunque es un mero agregado, por si puedes proporcionarme otra información interesante.
Harry frecuencia el ceño ante la palabra vas "otra información"
¿otra? ¿y cual ya tenia?
-¿que información?
La sonrisa de Umbridge se ensancho, si es que eso es posible.
-yo he hecho mi tarea, señor Potter. Averigüe cosas. Muchas cosas verdaderamente interesantes.-Harry fruncio aún más el ceño.-¿de la que hablaremos hoy? De su enamoramiento por el profesor Snape.
La cara de Harry palideció hasta ser mas blanca que la leche, si es que eso se posible.
-¿que... que sabe?-pregunto Harry, intentando no trabarse al hablar.
-todo lo que hay que saber.-la horripilante sonrisa de Umbridge contrasta contra el lívido rostro de Harry.-que lleva meses enamorado de él. Que hacia que él lo castigara apropósito para poder pasas tiempo con él. Y que cuando no pudo seguir castigandolo, empezó a tomar clases particulares con, y a equivocarse adrede para poder seguir tomándolas...
Joder ¿por qué pintaban a Harry como a una colegiala desesperada?
-... y claro, que desde que Dumbledore se fue sus esperanzas con el hombre antes desaparecido, porque se niega a darle clases, como cualquiera sensato, para tenerme en su contra.-algo en la sonrisa de Umbridge cambio, haciendo que Harry no pudieron evitar lanzarle una mirada llena de odio. Ella tenía "intenciones" con Severus. Con SU Sev.
-¿y?-pregunto Harry, sin disimular su odio.
-¿y?-pregunto Umbridge, divertida.-que lo tengo a mi merced, Potter.
-yo no veo como.-dijo Harry, desafiante.-bien podría decirle a todos que estoy enamorado de él. Me importa un comino lo que puedan llegar a pensar sobre si soy o no Gay. Y sobre lo otro, seria uno más de la mitad de la escuela.
Harry sonrio, sintiéndose victorioso, pero la sonrisa de Umbridge hizo vacilar la suya.
-oh, pobre e inocente Potter. Eso es un juego se niños comparado a lo que pienso hacer.-toda satisfacción abandono a Harry.-si quisiera, podría decir que Snape trato de aprovecharse de ti. Que no lo admites porque te tiene amenazado. ¿a quien crees que me creerían?
Harry se sintio aterrado al comprender lo que podría llegar a hacer Umbridge. No podia permitir que nada le pasará a Severus.
-¿que tengo que hacer?-pregunto, muy serio.
-por ahora, simplemente mantenerte alejado de él. Y con eso me refiero que no puedes ir a verlo ni con esa capita tuya.
¿como sabía de su capa?
-pronto te daré más instrucciones. Ahora vete.
Harry salio destrozado. Toda la felicidad que habia sentido aquella mañana se habia esfumado.
Se dirigio lentamente a la sala de Gryffindor, sintiéndose más vacío que nunca.
Ignoro a sus amigos y se encerró en su cama.
Abrazo sus piernas contra el pecho, intentado no pensar en el hombre que estaba esperandolo en ese momento. Aquel que se pasaría largas horas esperandolo, y que con cada minuto pasado fuera perdiendo las esperanzas y quedara igual de destrozado que Harry.
-.-.-.-.-.-.-.-.-
Vale, si, fue corto, pero... la culpa la tiene la escuela chicos😧🔫
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¿puedo Llamarte Amor?
FanfictionHarry Potter llevaba ya 7 eternas semanas en Privet Drive cuando paso lo primero interesante del verano. Lo primero que era parte de su mundo. Unos dementores los atacaron a él y a su primo, y luego de una larga noche de impaciencia y discusiones e...