capitulo 35

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Harry caminaba lentamente, acurrucado contra Severus, en dirección al despacho del director.
No se encontraron con ningún alumno o profesor de camino, a causa de que las clases habían comenzado hace 30 minutos.
-no sabía que esas cosa pudieran borrarse.-comento Harry, en un susurro amortiguado contra el hombro de Sev.
-bueno, es complejo, pero posible. Y Dumbledore cree que es mejor hacerlo, porque el señor tenebroso podría usarla contra mi.-le contesto Severus, acariciando lentamente el cabello.
Harry se estremecio ante la idea.
-¿puede hacerte daño?-cuestiono Harry, mirandolo de reojo.
-no por mucho tiempo.-dijo Severus con tono tranquilizador.
-eso es un si.-dedujo Harry, ni una pizca más tranquilo.
Potter se freno, y la mano de Severus dejo se cabello.
Snape freno pocos pasos después del chico.
-¿que pasa?
-no habías mencionado nada acerca de que podía hacerte daño.-replico el mas joven, haciendo un puchero.
-sabes que la marca nos conecta con el señor tenebroso, por lo que cuando el piensa en alguien, y toca su marca, puede hacerle lo que le plasca.-le explico Severus, y Potter fruncio los labios. Puso la mano sobre el antebrazo izquierdo de Severus, en el lugar donde, debajo de la tunica, se encontraba su marca.
-¿sabes? Aunque no lo creas, con eso no me has tranquilizado.-dijo Harry con sarcasmo, con la vista Clavada en el brazo del hombre.
Sev sonrio y arrincono a Potter contra la pared.
-eres verdaderamente tierno cuando frunces el ceño.-le susurro Severus, antes de besarlo.
Harry no se resistio, y le siguio el beso.
Potter lo abrazo por la cintura, acercandolo a si mismo.
Severus estába encorvado, para que Potter alcanzará sus labios.
Harry deslizo sus manos por el cuello del hombre, y enredo los dedos en el suave cabello de Severus.
Severus ahogo un jadeo contra los labios del chico, y se separo abruptamente de Harry.
Potter abrio los ojos, confuso, durante un segundo, sin saber porque Severus habia dejado de besarlo.
Busco a alguien alumno o profesor que los hubiera visto, pero el pasillo estaba desierto a excepción de ellos.
Ahogo un grito al ver a Severus doblandose por la mitad.
Jadeaba notablemente.
-¿Sev?-dijo Harry, con la voz temblorosa.
-T...ttene...mos que... ir con Dum...Dum...ble...dore.-dijo, entre jadeos y gemidos de dolor.
Harry se quedo en su lugar un momento, sin saber cómo actuar al ver a severus así.
Luego, rápidamente, paso el brazo de Severus sobre sus hombros, e hizo su mayor esfuerzo por caminar apresuradamente hacia el despacho de Dumbledore.
Luego de varios tropiezos, una caída de ambos al suelo, y otra sólo de Severus, llegaron hasta la gárgola que vigilaba la entrada del despacho de Albus.
Severus murmuró la contraseña con mucho esfuerzo, y Harry se apresuro a arrastrarlo por la escalera hacia escaleras despacho, verdaderamente preocupado y aterrado de lo que pudiera pasarle a Severus.
Toco apresuradamente la puerta del despacho, pero nadie abrió.
Toco otra vez, con su desesperación en aumento.
¡Joder, Severus aprecia a punto de desmayarse!
Claro, por no decir algo peor...
-Harry, Severus ser mejor que vuel...-Dumbledore acababa de acababa británico la puerta, pero se freno a media frase al ver a Snape.-será mejor que entren. Pense que tendríamos más tiempo para hacer esto.
El director dejo pasar a Harry, que cruzo rápidamente hacia el sofa y dejo a Severus allí.
El hombre aún se retorcía de dolor, y lo único que evitaba que estuviera gritando era que se mordía los labios para ahogar cualquier sonido. Del lado derecho le salía sangre.
Dumbledore subió rápidamente la manga del hombre.
-Kingsley, Fudge, deben sostenerlo.-ordenó Dumbledore, y por primera vez desde que entró Harry se dio cuenta de que allí estaba el ministro y su escolta personal.
Ambos hombres hicieron lo que Dumbledore les pidió, muy serios.
Dumbledore alzó su varita, y murmuró algunas palabras que Harry no consiguió entender.
El chico caminaba al rededor de los hombres, extremamente desesperado y nervioso, y sintiéndose inútil por no poder ayudar a su novio.
-¡Deletrius! -exclamó Dumbledore, y su voz resonó en todo el despacho.
Harry vio con asombro como, lentamente, las líneas que componían la marca se borraban de la piel de Severus.
Severus lentamente dejo de tratar de zafarse del agarre de los dos hombres, relajo la fuerza de sus dientes contra un labio y su exprecion se relajo. Su respiración se volvió lenta y profunda, como si estuviera dormido. Y mantuvo los ojos firmemente cerrados.
Harry suspiro, aliviado, y se acercó al hombre. Pero Kingsley le contó el paso.
-¡he!-se quejo Harry tratando de rodearon. El hombre volvio a cortarlo el paso.
-Harry, será mejor dejarlo descansar. ¿deberías ir a clases, no lo crees?-Potter se volvió mirar al director como si estuviera loco.
-pero...-comenzo a replicar Potter.
-ahora.-ordenó el director.
Harry lo miro desafiante durante un momento.
Luego, se dirigio lentamente hacia puerta y salio.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.
-quiza sólo necesitaba descansar.-le dijo Hermione, para luego morder un papa frita.
-se los digo, algo no va bien. Se comportaron muy raro.-replico Harry, luego de contarles apresuradamente a sus amigos lo que paso.-y ahora, Sev no viene a almorzar. Algo pasa.-almorzar firmó Potter, pars Luego mirar a la mesa de profesores, donde el asiento de el as profesor de pociones seguía desocupado.
-Hermano, no creo que debas preocuparte. Si pasará algo, Dumbledore te lo diría, ¿verdad?-le dijo Ron.
-yo... no lo se.-dudo Harry.-algo no va bien, lo presiento. Tiene.. tiene a un ver con como me miró Dumbledore cuando me ordenó ir a clase. Habia firmeza en su mirada, pero además... habia pena, como si me compadecerse.-afirmó Potter.
Los cuatro amigos voltearon a la vez a ver la mesa de los profesores, y todos fueron consientes de que Dumbledore habia estado mirando a Harry.
-.-.-.-.-.-.-.
Potter estaba harto. Si no le decían algo de Severus en los próximos 10 segundos, tiraría la puerta del despacho y lo averiguará por si mismo.
Volvio a tocar la puerta del despacho, y como su Dumbledore le leyera el pensamiento, esta vez le abrieron.
-entra, Harry. Debemos hablar.-le dijo el anciano director, muy serio.
Harry entro sin decir nada.
Dentro del despacho seguían el ministro y Kingsley, y Severus seguía recostado en el mismo lugar donde Harry lo habia dejado, solo que lo habían cubierto con una manta hasta la barbilla
-quiero saber que pasa.-exigió Potter con voz calmada.
-Potter...-comenzo el ministro.
-será mejor que se lo explique yo, Cornelius.-lo interrumpio Dumbledore, y el hombre asintio de mala gana.-Harry, sabes que hay leyes ¿verdad?
Harry fruncio el ceño. Que pregunta estúpida, considerando que el habían tenido un juicio a finales de agosto.
-si.-dijo, tragándose todas las respuestas sarcásticas que queria decir.
-bueno, las hay de diversas clases. Sobre la magia y sus usos, sobre criaturas mágicas, sobre objetos magicos... y hay otra clase de reglas, algunas que seguramente recordarás del mundo muggle.-Dumbledore estaba extremadamente serio.-sabes que a partir de los 17 años puedes hacer magia fuera del colegio ¿verdad?-Harry asintio.-y eso es porque se te considera mayor de edad en el mundo magico.-Harry miro al director.Joder, esperaba estarse equivocando.-y hasta que no seas mayor de edad, salir con alguien que si lo es, es ilegal.
Harry miro nuevamente a Severus. Debajo de las mantas, podía ver sus manos sobre el regazo, lo suficientemente junta como para tener esposas puesta.
-Harry, Severus debe ir a Azkaban.-le dijo Albus.
-pero... pero... ¡no pueden hacer eso!-balbuceo Harry.
-es la ley, chico.-le recordo Fudge.
-No, por favor.-rogo Harry.-no le hagan eso.-miro alternativamente al director y a Fudge, suplicante.-haré lo que quieran.
-nosotros no podemos...-comenzo Fudge, con desinterés
Harry paso de la preocupación extrema a la ira (mejor dicho, se le sumo, peor bueno.).
-si deja que de lo lleven a Azkaban, juro que no haré nada para detener a Voldemort. No se porque, pero se que me necesitan para matarlo. Y si le hacen eso a Severus, juro por Merlin que Hasta lo ayudare.-amenazo Potter, y hablaba en serio.
Albus miro a Cornelius durante un minuto.
-hay una manera... de evitar que rl vaya a Azkaban.
-¿como?-pregunto Harry con un deje de desesperación en la voz.
-podría ser absuelto.-mascullo Fudge.-pero no podrías volver a salir con el hasta que seas mayor de edad.
A Harry se le cayó el alma a los pies.
-pero... Para eso faltan 2 años.-susurro.
-son las dos opciones que tenes, Harry.-le dijo Dumbledore.
-esta bien.-acepto Harry, sintiendo su corazón altura aceleradamente.-absueltenlo. No me acercaré a él Hasta que tenga 17.-juro Potter.
Dumbledore vio que el labio inferior de Potter temblaba, al igual que el resto de su cuerpo. El chico estaba a punto de llorar mientras le quitaban las esposas a Snape.

¿puedo Llamarte Amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora