HUMANOS | Julian Brandt

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Tengo una teoría.

La felicidad y la tristeza que uno va adquiriendo al paso del tiempo y también dependiendo de los momentos son como cargas de energía que va absorbiendo tu cuerpo de manera lenta. Mientras más energía de felicidad absorbas más feliz vas a estar y vas a seguir así hasta que te sobrecargues y necesites algo en que poner tu energía.

Entonces la colocas en las personas que quieres, en tu hermoso trabajo, en la sociedad y en lo demás que nos rodea. Esperas por un momento hasta que empiezas a sentir la falta de ello y lo extrañas, también se te hace incómoda la nueva sensación de vacío y amargura en la garganta.

Sin pensarlo lo que ahora tomo tu cuerpo fue la tristeza porque simplemente te inflaste demasiado de la felicidad y explotaste para quedar otra vez seco y encontrar lo que más fácil se ve, la tristeza.

Es igual el procedimiento pero este se te hace más lento. Es en el que más se sufre por que esperas sentir la sensación de satisfacción rápido, la quieres ya y te esfuerzas pero simplemente la tristeza te lo impide y vas cayendo en ella. Sin que te des cuenta te vence por que hasta que no estés lleno de ella y llegues al clímax de todo, no vas a volver a tener tu deseo.

Esa es mi interpretación de los sentimientos humanos más comunes. 

Y lo siendo así en mi vida porque sé que explote de la felicidad y me fui llenando de tristeza, sentimiento que ahora se fue y volvió mi deseo más fuerte, la felicidad. 

O es así como me siento ahora.