Las siguientes seis cartas de Hae contaban paso a paso los progresos que Haru iba teniendo, para mí eran pocos, para él enormes. Ashh... el niño ni siquiera había despertado pero él me contaba cómo había movido un dedo, si había suspirado y me juraba que lo veía sonreír cuando le leía el cuento de Blancanieves...
Me contaba mucho sobre el pequeño pero nada acerca de él, de seguro porque había estado tan pendiente de cuidarlo que se había olvidado de prestarse atención a si mismo. Debería haberlo regañado si hubiese estado ahí, pero en parte me alegraba que hubiera tenido algo con qué distraerse de su propia soledad.
Al final llegó la carta donde me contaba que había despertado, era corta y lo único que decía era:
'¡¡¡¡Hyukiii, Haru despertó hoy!!!! El niño tiene unos hermosos ojos color gris tormenta. Son preciosos. Pero no habla, no sé por qué. Quizás es la secuela del accidente, eso es lo que piensan los médicos; yo opino que es como yo, sencillamente no quiere hablar. Te prometo que voy a hacer que hable como tú hiciste conmigo. Bueno, eso por hoy, tengo que ir a verlo de nuevo. Te amo bebé.
Donghae'.
Era literalmente la carta más corta que había recibido en mi vida, quería envidiar al niño por robarse la atención de mi pez pero había leído tanto de él que hasta le había tomado cariño.
La carta siguiente fue más interesante.
3 de Agosto de 2014. Al lado de la cama de Haru, ala de pediatría.
¡Hola precioso!
¿No es un día muy bonito hoy? La lluvia cae; me encanta ver la lluvia.
Extraño escribirte, han pasado unos días desde la última vez, pero es que he estado concentrado en hacer que Haru me hable... es casi imposible, ni siquiera me mira y si lo hace pone cara de susto y vuelve a mirar a otra parte...
Ya sé que debo de asustarlo siendo piel y hueso, pero ya debería de haberse acostumbrado a como me veo porque estoy todo el día con él. El niño ha drenado toda mi autoestima...
Estoy comenzando a enojarme, pero voy a tenerle algo más de paciencia. Sé que es difícil lo que está pasando. Aunque no lo creas no se sorprendió ni se puso a hacer berrinche cuando le dijeron que sus padres habían fallecido; sí lloró mucho, pero casi en silencio como para él mismo. Lo abracé en ese momento y lo dejé ahogar sus suspiros en mi pecho; él se aferró fuerte a mí y...
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Ok, lo anterior ya no tiene importancia seguir contándolo. Lee bien esto: mientras estaba escribiéndote, Haru despertó y silenciosamente se quedó leyendo lo que ponía. Le pregunté si sabía leer y escribir y él asintió. Luego le pregunté si quería que le diera papel y un lápiz para que él también pudiera escribir y volvió a asentir.
Busqué otro cuaderno en la sala de juegos (porque no pensaba dejarle el mío) y volví a la habitación con él, le di el papel y el lápiz y lo primero que escribió fue: '¿Cómo te llamas?'
Me sorprendí mucho de que me preguntara aquello porque ya se lo había dicho antes, pero le respondí para que no perdiera la confianza. Le pregunté si sabía hablar y asintió, luego le pregunté por qué no lo hacía.
'Porque no quiero que él me escuche y sepa que estoy aquí', escribió.
Como no sabía a quién se refería, se lo pregunté. Lo que puso luego me dejó helado.
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No me odies, yo te amo.
Romance¿Qué pasa cuando, sin razón alguna, la persona a la que has amado toda tu vida y que asegura amarte de igual modo, te abandona de la noche a la mañana? ¿Perdonarías a esa persona? ¿Cuánto daño puede causarte? Lee Hyukjae es el hombre más miserable d...