My lovely Idiots |Magcon boys|

C U A R E N T A Y U N O

«Hayley»

-Quedate quieta, no puedes moverte- me regañó Shawn mientras, yo sólo lo ignoré y me puse de pie.

-Si, puedo, lo estoy haciendo- le dije, y entré a la casa.

¿Donde era que estaba él baño del primer piso?

-Hayley, cuanto te golpeas la cabeza no te puedes poner de pie tan rápido ¡Puedes morir!- me regaño otra vez y frené en seco, haciendo que chocara con mi cuerpo, no sabía que me estaba siguiendo, ni que venía tan cerca.

-Uh, lo siento- le dije y él negó.

-Hayley, hazme caso, quedate quieta, y sentada, yo voy por algo para curarte ¿Si?- me dijo y asentí, mientras todos entraban a la casa y se ponían a mi alrededor.

-¿Te duele?- me preguntó Taylor y todos, incluyéndome lo miramos mal.

-No, me da risa- le dije sarcástica.

-Ya, ya, es que, te pusiste de pie tan rápido, que pensé que no te había dolido- dijo excusándose y rodé mis ojos.

-Es soportable- alcé mis hombros, y todos seguían viéndome algo preocupados -¿Tan mal está?- pregunté y se miraron entre ellos.

-¡No! No, te vez linda, como siempre- dijo Carter apresurándose en decir, algo nervioso. Lo miré con una ceja alzada y todos rieron nerviosos.

Ni saben mentir.

-¡Estoy vivo! Que bien que pregunten, si lo sé... Y ¡Santa mierda! Hayley ¿Que le pasó a tu cara?- dijo Sam bajando las escaleras, viéndome espantado y lo miré mal.

-Lo sabía- dije rodando mis ojos y Sam se acercó un poco.

-No, te ves bien... Solo tienés un poco rojo en... Aquí- apuntó toda mi cara y Johnson le golpeo la nuca -Auch- se quejó.

-Amh, no hay alcohol, ni agua oxigenada, ni parches, solo encontré un poco de algodón- dijo Shawn apareciendo con algodón en sus manos.

-Iré a comprar todo eso- dijo Johnson tomando las llaves del auto.

-¡Yo quiero ir!- dijo Carter, y de la nada estaban todos saliendo de la casa, en realidad, solo Cameron, Gilinsky, Carter, Taylor, Aaron y Hayes, él resto se quedó.
-¿Te sientes bien? ¿No te duele la cabeza?- me preguntó Shawn agachándose a la altura de mi cara examinándome y asentí.

-Estoy bien, solo me arde mucho, todo- dije intentando ser divertida, pero él seguía con su mirada de preocupación.

-Te traeré un poco de hielo, no puedo hacer mucho sin desinfectante las heridas primero- dijo poniéndose de pie y fue a la cocina.

Me quedé mirando mis brazos y los intenté tocar, pero me ardió y solté un quejido.

¿Por que si quiera pensé en tocarme las heridas? Soy una estúpida.

-Si, lo eres- dijo una gruesa voz y alcé mi mirada para ver a Nash mirándome divertido y rodé mis ojos para luego mirarlo confundida -Pensaste en voz alta- dijo obvio.

¡Siempre pienso en voz alta! Debería dejar de hacerlo.

Pero ponlo en práctica.

-Ok, riete ya, riete todo lo que quieras, espero que lo hayas grabado, así tienes mas para burlarte- dije frustrada y algo molesta con él.

-No, aposté con Cameron que podía estar dos semanas sin insultarte o burlarme, y soportarte- dijo cruzándose de brazos y lo miré ofendida -Y debo admitir que hasta a mi me dolió tu caída, fue fea- dijo haciendo una mueca y luego se dio media vuelta para irse.