My lovely Idiots |Magcon boys|

C I N C U E N T A Y U N O

«Hayley»

Abrí uno de mis ojos por el dolor de cuello que tenía, pues durante la noche, mi almohada se había ido a la mierda y dormí sin ella.

Esta tortícolis me mata.

Me incorporé y miré a mi costado. Estaba Lilly durmiendo plácidamente, con almohada, mientras que yo me quejaba silenciosamente, definitivamente dormir en el suelo no me favoreció.

Abrí mi saco de dormir, no sin antes ver mi teléfono y chequear la hora, eran las 8:47 de la mañana, bastante temprano para ser yo. Salí de la carpa; que cabe decir que la tuve que armar de nuevo ayer porque Lilly no fue capaz de hacerlo y le salio como las pelotas; y miré a mi alrededor.

Al parecer nadie estaba despierto a esta hora.

Restregue mis manos en mis ojos y bostece despacio para luego rascarme el cabello, agradecía tenerlo corto, pues así no sentía tanto calor.

El lugar donde acampabamos, era literalmente un terreno sin nada, no luz, no agua, ni si quiera una mesa para desayunar, que suerte que traje dos mesas para cuatro personas, habrá que turnarse para ver y desayunar. Lo que si tenia era un lugar donde puedes hacer una fogata, y asientos  de madera a su alrededor, ayer no la utilizamos porque la mayoría se fue a dormir en seguida, y ni si quiera alcanzamos a prender fuego para calentarnos un poco.

Sentí como mi estomago gruñio y fruncí mi ceño. Me dirigí al auto donde teníamos nuestro bolso con víveres y de este saqué agua destilada, pan y algunos huevos. Como no había gas, tendría que cocinar todo a fuedo de fogata, incluyendo el agua y los huevos, así que utilicé todo lo que me enseñaron en el semestre de scout que hice y encendí un poco de leña, con fósforos y encendedor. Coloqué el agua en una tetera antigua que traje, y los huevos en una sartén.

—Buenos dias— escuché y pegue un saltito.

—Mierda Aaron, me asustaste— le dije al chico que estaba reciend despertado —Buenos días.

—Lo siento. ¿Que preparas?— me preguntó viendo por encima de mi hombro, pues estaba cocinando muy cerca del suelo.

—Huevos para desayunar. ¿Deseas?— le pregunté y el sonrió.

—Claro, iré por algunas tazas— dijo apuntando el auto y asentí, mientras dejaba el huevo revuelto ya listo en un pote —¿Cómo dormiste?— me preguntó a la vez que llegaba a mi lado con las tazas y alce mi hombros.

—Pudo haber sido mejor, de veras— dije sobando mi cuello, porque mierda que dolía —¿Y tu? ¿No pasaste frío?— le pregunté mientras le hechaba café a mi taza y el hacia lo mismo.

—Sorprendentemente dormí genial, y no, nada de frío, pero fue porque le gané a Matt y le quité la manta— dijo con una sonrisa maliciosa y sonreí de lado.

—¡Buenos días! Wow, desayuno, que bien— dijo Gilinsky saliendo de su carpa y lo detuve.

—Antes ve a traer las mesas y luego vienes a desayunar— le advertí y el hizo un puchero, pero de todas formas me hizo caso y fue al auto a buscarlas.

—¿No quieren recorrer por aquí luego? Creo que escuché un río— dijo Jack Gilinsky llegando con la mesa armable.

—Claro, sería genial— le dije asintiendo.

—¿Cómo se hace esto? — preguntó mirando la mesa mientras se rascaba la nuca y rodé los ojos para acercarme a el y comenzar a abrir y armar la mesa.

—Así se hace— dije obvia y el hizo o un puchero.

—No soy tonto— me apunto y le sonreí divertida.