My lovely Idiots |Magcon boys|

C I N C U E N T A Y C I N C O

«Hayley»

Miré a Jack algo triste, aunque ya sabía que esto se venía de algún modo, todo indicaba a algo "Jack ya no me quiere" y tenía razón.

Ouch. ¿Escuchaste ese crujido? Fue lo poco de corazón que te quedaba.

—¿Ah... no?— dije de forma estúpida con la voz algo quebrada. ¿Por qué se me quiebra la voz? —Ay Dios, no ¡que estúpida! Ignórame, es que...— dejé la frase en el aire y solté un suspiro. Sentí como las lágrimas se acumulaban de golpe en mis ojos e intenté retenerlas lo más que pude, y con todo el esfuerzo del mundo continué —Sólo... Me tomaste por sorpresa.

Aunque, para ser honesta, en este momento se me hacía horriblemente difícil no llorar.

Aún así no cayó ninguna lágrima.

Sentí como unos brazos me envolvían repentinamente, pero no le devolví el abrazo a Jack ya que me derrumbaría al instante.

—¿Estás bien?— me preguntó y tomé una bocanda de aire, me relamí los labios y y asentí —Por favor, di algo— dijo mirándome. Dios, esos ojos.

Que lindos ojos.

—¿Q-qué...?— la voz se me quebró pero rápidamente la arreglé tosiendo —¿Qué quieres que diga Jack? No puedo rogarte para que me quieras otra vez. No puedo hacer nada más que solo decirte... Está bien, yo no puedo obligarte a hacer cosas que no puedes— dije sin mirarlo a los ojos y él tomo mi mano pero la alejé.

—Hayley, yo te quiero, pero...

—No de la misma forma, lo entiendo— lo corté y me alejé unos metros para sentarme sobre un tronco talado de árbol que había cerca. Puse mis brazos a mis costados, apoyando mis manos en la áspera superficie. Lo que más deseo es estar sola en estos momentos, para poder pensar tranquila.

Lástima que no todo resulta como se desea.

Jack se puso frente a mí en puntillas, intentando consolarme de alguna manera. Posó su mano en mi hombro haciendo fricción y no lo corrí, ya me estaba comportando muy arisca con Jack y él no tenía la culpa. O supongo que no, aunque quizás sí, o quizás yo la tenga, o ambos.

O sólo el destino en empecinarse en dejarme sola, y tengo miedo.

—¿Te sientes bien?— me miró fijamente esperando a que le respondiera de vuelta.

—Ya lo preguntaste— respondí a secas, y Jack me miró sorprendido- ¡Diablos!, lo siento... No me malinterpretes, ni yo sé lo que me pasa- puse mi mano bajo el flequillo tocándome la frente—. Yo sólo creí que, ya sabes— nos señalé—... Pensé que resultaría, pero al parecer el Olimpo me odia y decidió que sería la única criatura sin su pareja.

Jack me miró extrañado e intenté explicarle nuevamente.

—Siempre me pasa lo mismo, y ya no sé si rendirme o no con todo este tema del amor. Me ha pasado más veces de las que puedo contar con los dedos de las manos... Ambas— me miró triste, pero seguí hablando —Y no quiero que pienses que es culpa tuya, siendote honesta yo tampoco sentía algo más que cariño por ti, y lo sigo teniendo— intenté sonreírle en lo que ponía mi mano ahuecando su mejilla, a lo que él me devolvió la sonrisa mostrando sus dientes —Voy al campamento— dije poniéndome de pie, y caminé hacia donde se escuchaban los chicos.

—Hayley, espera— dijo tocando mi hombro y me volteé a verlo —¿Estamos bien? Digo, como amigos— me preguntó y asentí.

Dèja Vu, o debería decir Dèja Drew, ¿entiendes? Porque...

Ja, ja, ja.

Ja.

—Sí, ¿por qué no?— dije alzando mis hombros y seguí con mi camino. Al llegar al campamento, todos se voltearon verme, y eso hizo que suspirada algo nerviosa y con la cabeza gacha me dirigiera a un lado de Lilly. Johnson llegó a los segundos, no vi cuando llegó, pero sí lo supe porque todos también voltearon a verlo, supongo que se fue a su carpa y se fue lejos porque no lo vi sentarse.