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Las imágenes de Diane y la pregunta del detective Grisham "¿Por qué torturarla de esa manera, cortarle la lengua y arrojarla al Rio Hudson?", no abandonaban mi mente ni un momento, cada una me llevaba a la misma persona y a la primera vez que escuche palabras similares, escalofríos invadían mi cuerpo a cada instante y ni siquiera los calmaba el hecho de que Stephen me abrazaba con fuerza ¿desde hace cuánto lo hacía? No me había dado cuenta, estaba tan perdida en mis pensamientos, en el miedo y la unión de todo lo que sentía que ni siquiera me di cuenta que habíamos llegado a nuestra casa.

- Tranquila.- me dijo Stephen tomándome y acariciándome de las manos, estaba sentada en el sofá de la sala. Me miraba preocupado.- No tienes que ver en nada de lo que le paso a ella, bonita.

- Creo que se quien fue.- dije con una voz temblorosa, su reacción fue de sorpresa.

- ¿Cómo?- en ese momento sonó mi celular. Él fue hasta mi bolsa lo saco.- Es Paxton.- alce la mirada inmediatamente cuando dijo el nombre, fui directo a él, le quite el celular víctima de un sentimiento que me estaba quemando por dentro.

- Pequeña, ¿Dónde estás?- escuche decir a James.

- ¡No me llames así!- dije con tanto coraje. Stephen se me quedo mirando aún más confundido.

- ¿Ana que pasa?- pregunto James

- ¿Cómo me preguntas que pasa? ¿Cómo eres capaz de hablarme después de lo que hiciste?

- ¿Qué hice querida Ana?

- ¡Ya no finjas!- explote.- Sé que tú eres el que esta atrás de todo lo malo que me ha pasado a mí, desde el atentado en mi departamento hasta...

- Ana, no digas eso, yo no soy el culpable de eso.- me interrumpió.- sería la última persona en quererte hacer daño además tu y yo tenemos un trato.

- ¡No tenemos nada! Escúchalo bien James tu y yo no tenemos nada.- hice una pequeña pausa.- ¿Por qué James porque lo hiciste? ¿Por qué la mataste de esa forma?

- ¿A quién?

- ¡A Diane, la periodista!- el ceño de Stephen se frunció.

Yo no la mate Ana.

- Confiaba en ti, le dije a los demás que tú no eres ese culpable que buscábamos cuando mi atentado sucedió y ahora veo tan claro.- un par de lágrimas comenzaron caer.

- Ana...- solo escuche eso. Stephen me retiro el teléfono.

- Escúchame bien Paxton, me cobrare todo el daño que le has generado a Ana, a mi familia y si quieres inculparla por un crimen que es tuyo, temo decirte que te metiste con las personas equivocadas.- Stephen se escuchaba tan molesto, apretaba el celular de una forma que parecía que lo destruiría.- Quieres un consejo Paxton, escóndete bien porque cuando yo te encuentre, que te prometo lo hare, desearas jamás haber nacido. Te lo aseguro.- Stephen colgó al instante, lanzo el celular y se acercó a mi.- ¿Por qué dices que fue él?

- Recuerdas el viaje a las Vegas, el día que fui a verlo por la mañana.- Stephen asintió.- Cuando entre a su habitación , él estaba teniendo una llamada y le decía por teléfono a alguien "Tan fácil córtenles la lengua y láncenlos al rio Hudson, los peces se los agradecerán".- sentí un gran escalofrió y abrace a Stephen.

- Tranquila.- me dijo acariciando mi cabello y abrazándome con fuerza.- No dejare que nadie te haga daño.- me separo un poco y me tomo de las mejillas.- Te amo Ana y mientras esté vivo nadie te lastimara, ni a ti ni a nuestro hijo.- me pego de nuevo a él. Escuchamos que la puerta de la casa de abrió y unos pasos apresurados.

Contigo Ahora y SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora