11.

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Invierno.

El frío invierno había llegado.

Y con ella la blanquecina y abrumadora nieve.

Como tú...

Los árboles estaban rociados con una fina capa del néctar.

Las calles tan silenciosas y frías para mi gusto.

Y las ráfagas de viento me traían recuerdos nada gratos.

El otoño se había ido.

Y se fue contigo.

El cálido viento ya no estaba.

Como tú.

Las hojas que adornaban el piso ya no estaban

Como tú.

Las flores otoñales desaparecieron.

Como tú, Áster.

Aspire sin ganas a mi única compañía, viendo como aquella ráfaga llevaba el humo que había sido testigo de tal crimen cometido.

El asesino: tú.

Víctima: yo.

Causa: Desconocida.

Y me levanté del asiento viendo como ponían en cartel "cerrado" en nuestro antiguo lugar de encuentro; la cafetería.

El amor en tiempos de  CafeteríaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora