Recuperando Mi Vida

Capítulo 6

Lucia bajó del escenario, y volvió a sentarse en el asiento junto a mí sin emitir palabra, ni tampoco cruzando nuestras miradas.
El profesor nos felicitó a todos y nos dijo que nos esperaba la próxima clase.

Salimos del lugar e hicimos todo el trayecto hacia el departamento en silencio, ya la llenaría de preguntas cuando llegásemos.

-Qué querés cenar? Me dijo ella con total naturalidad dirigiéndose hacia la cocina.

-Me parece que tenés un par de cosas que contarme antes de pensar en comida.- dije tratando de sonar calmada.

-Agus yo...- la interrumpí

-No lo intentes. No me digas que todo eso era parte de un acto y que fue todo mentira, porque sé que no es así, si no para que lo habrías dicho?- dije ahora un poco más alterada pero logre calmarme.- Cómo es eso de que tengo dos hermanos?-

Soltó un gran suspiro como dándose por vencida- Primero que todo, no quiero que te enojes conmigo por no habértelo dicho, me dijeron específicamente que no debes pasar por situaciones de angustia y tristeza, yo solo trato de protegerte, quizás no de la mejor manera, pero todo lo que hago es por tu bien.

-Hablá ya.- dije

- Bueno. Tú ya conociste a Sofi. Pero... además de ella tenías un hermano de 14 años, Bautista.

-Tengo.- dije

-Tenías.- afirmó ella. Ahora si empezaba a preocuparme.- Verás, tu ya sabés que tú y tu familia tuvieron un accidente, verdad? Bueno, él...- su voz empezaba a sentirse cortada.

-Él qué? Hablá dale.- dije casi gritando.

-Cuando lo trasladaron al hospital, descubrieron que tenía una muy rara enfermedad en la cual no podía exponerse a golpes demasiado fuertes, ya que eso sería fatal para él.- creo que comenzaba a entender la situación, y a decir verdad, no me gustaba en lo absoluto.- En él accidente recibió un golpe muy fuerte, sobre todo en su cabeza y espalda. Los médicos hicieron todo lo posible, lograron mantenerlo estable durante unas dos o tres semanas. Pero algo se complicó. Él...él falleció Agus.- las lágrimas corrían cada vez más y más fuerte por mis mejillas.

-Y Sofi? Como es que nunca habló sobre él?-

-Tu hermanita está en un estado muy especial, solo recuerda lo que ve, como a Bauti no lo vio, para ella él no existe. Igual quedate tranquila que ella no corre peligro.

-Y mi abuela? Ella dónde está?-

Volvió a respirar profundo, sabía que lo que seguía no era nada bueno.- Ella falleció de leucemia hace un par de años, solo que no lo recuerdas.-

No tenía palabras para explicar lo devastada que me sentía en ese momento. Solo salí del departamento y comencé a correr, no sabía por que razón reaccioné de esa manera, pero necesitaba salir de ahí.

No me importaba que ya estuviera oscureciendo ni que no conociera la ciudad.

No iba mirando cuando de repente algo choco contra mí. Cerré los ojos esperando sentir mi cuerpo impactar contra el suelo. Pero eso no pasó. Unos brazos me sostuvieron en el momento exacto y evitaron que cayera.

-Siempre nos cruzamos a los golpes parece.- dijo una voz que me sonaba algo familiar.

Al abrir los ojos me encontré con aquellos ojos verdes que había conocido en el centro comercial. Iba a contestarle pero me interrumpió.

-Agustina, no?- dijo él con una sonrisa tratando de no dar a entender que se acordaba perfectamente de mí.

-Hola Cristian.- dije algo tímida e intentando limpiar mis lágrimas para que no las notara, pero mi intento fue en vano.