Recuperando Mi Vida

Capítulo 3

Esa noche nos quedamos despiertas hasta tarde mirando unas fotos que Lu tenía guardadas de nosotras.
Al día siguiente me levanté, y ella estaba en la cocina preparando el desayuno por lo que decidí ayudarla.
Con todo lo que paso el día anterior, me propuse a mi misma a confiar en ella, sabía que estaría dispuesta a darme una mano.

-Buenos días.- Dije al llegar a la cocina.

-Hola. Como dormiste?- me respondió mientras ponía un par de tostadas en la tostadora.

-Bien- dije- Puedo hacerte una pregunta?

Dejó lo que estaba haciendo y ahora me miro fijo a los ojos- Claro, qué pasa?-

-Mi hermanita, ella, dónde está viviendo? No sería mejor que estuviera acá conmigo?-

-Mira, Agus...yo entiendo que te preocupes por ella, después de todo es tu hermana, pero...ella está con tu tia, Melissa, te acordas? Cuando Sofi despertó decidimos que sería lo mejor para ella. Y además, tú eres menor de edad, no podrías estar a cargo de ella.- cada palabra la decía con total suavidad, con temor de que yo no lo tomara del todo bien.

-Si, bueno, yo entiendo lo que quieres decir. Pero es mi hermana, quiero pasar tiempo con ella. Podemos ir a visitarla?-

-Por suerte ellos viven a unas dos cuadras de aquí, pero el doctor dijo que debes hacer reposo, por lo menos esta semana- mi rostro se torno algo triste, cosa que ella noto y dijo- Pero...si quieres...puedo decirle a tu tía que la traiga hasta aquí.

Sonreí.- Gracias, de verdad-

Tomamos el desayuno mientras ella me contaba sobre un chico de la universidad que le gustaba mucho, estaba estudiando para ser maestra. Yo la escuchaba atentamente.

-Me encanta, y creo que yo a él también, pero su ex novia, lo sigue a todas partes, cuando estamos hablando viene y se mete entre nosotros, lo llama por teléfono todo el tiempo, te juro que no la soporto.

-Si el quiere estar con vos, no le dará importancia a ella, deja que las cosas se den- no se de donde salieron esas palabras, pero considero que fue un gran consejo.

A media mañana, Lu trajo un montón de libros y apuntes que supuse que eran de la universidad.

-Te molesta si estudio aquí?- dijo

-No- respondí.- Lu...eem...yo, en que año estoy? En el colegio digo.

-Deberías estar cursando el último año- dijo- si quieres terminar el colegio debes rendir todas las materias a fin de año, ya que con todo esto del accidente perdiste meses de clases.

-Ah. Y, eso cómo se hace?

-Supongo que vas al colegio, le cuentas lo que sucedió, y pides el temario para comenzar a estudiar. Si quieres puedo pedirle las carpetas y libros a uno de tus compañeros.

-Si. Si quiero. Quiero terminar lo antes posible así poder estudiar una carrera universitaria y comenzar a trabajar- dije sinceramente- Igual puedo buscar un trabajo hasta que termine el año, como para ayudarte con las cosas de la casa y demás.

-Agus, nadie contrata a menores-

-Bueno pero, tengo 17 no? Cuando es mi cumpleaños?- pregunte

-Dentro de unas semanad-

-Listo entonces. En un mes comienzo a trabajar- dije dirigiéndome a mi habitación antes de que pudiera decirme algo.

Recostada sobre la cama, me percaté del libro que se encontraba sobre la mesita de luz, y me dispuse a terminar de leerlo, solo me faltaban unos pocos capítulos.

Una frase quedó grabada en mi memoria:

"Me pregunto si las estrellas se iluminan con el fin de que algún día, cada uno pueda encontrar la suya."

Mi estrella, mi pasado, mi vida, algún día podría recuperarlo? Toda mi infancia y parte de mi adolescencia, las personas que me acompañaron en mis primeros pasos, o que solo estuvieron temporalmente en mi vida. Cada persona que me enseño algo, que me dejo una lección de vida. Que me ayudo a levantarme si alguna vez pase por momentos difíciles, y las que me apoyaron en mis triunfos. Aquellas que rompieron mi corazón, y las que estuvieron ahí para sanarlo. Las que me dieron experiencias agradables, con ganas de volver a repetirlas, y las que me enseñaron las cosas que definitivamente nunca debo hacer. Donde están esas personas? Se preguntarán por mi? Me recordarán? Recordarán los momentos vividos conmigo? Lu aveces me cuenta anécdotas, momentos que viví. Pero yo al escucharla, no siento que fuera mi vida, que fuese yo la persona que pasó por todo eso. Siento como si contara la historia de otra persona ajena a mi, y le pusiera mi nombre.

El sonido de la puerta me saco de mis pensamientos, lo cual agradecía ya que de lo contrario no me sorprendería si las lágrimas comenzaran a aparecer.

Una pequeña entro corriendo y se lanzó sobre mi cuerpo recostado en la cama.

Yo solo la abracé fuertemente, dándole a entender que nunca la dejaría caer, que siempre estaría con ella.

-Sofi, mi amor, cómo estás?- le dije cuando nos separamos.

-Bien Agus, te extrañe un montón.- me dijo, y yo volví a abrazarla.

Fuimos a la cocina ya que era la hora del almuerzo, preparamos unos sandwiches y nos pusimos a charlar.

-Me saqué excelente en una prueba de matemática.- dijo la pequeña orgullosa de si misma

-Enserio? Wow, eres muy inteligente, te felicito- dije sonriendo- Y con tus compañeros? Todo bien?

-Si, con mi mejor amiga estamos siempre juntas. Bianca se llama. El otro día me invito a su casa pero la tía no me dejo ir, me dijo que debo descansar- dijo haciendo un pequeño pucherito que me lleno de ternura.

-Y tiene razón, tenés que hacerle caso. Dentro de un tiempo podrás ir las veces que quieras a jugar a su casa. Y algún día, podemos invitarla y vienen las dos acá, que te parece?

-Siiii!!- dijo levantando los brazos y gritando de felicidad. Yo solo reí por su reacción.

Pasamos la tarde jugando, pintando, mirando dibujitos en la tele, mientras ella me contaba anécdotas del colegio y su amiga. La verdad es que me hacía muy bien pasar tiempo con ella.

A eso de las 7 pm mi tía vino a recojerla. Charlamos un rato y luego se fueron.

Lu me invito a comer a mc donalds esa noche. Me hizo bien salir un rato. Paseamos por la ciudad, mirando tiendas y contemplando la hermosa vista que tenían mis ojos. Un cielo totalmente estrellado y una hermosa luna llena completaron la cálida noche de primavera.