Undress Me j.b

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Mi cuerpo tocó la suave y fina tela que cubría la cama de Justin.

-¿No hay nadie? - Pregunté mientras intentaba parar esto antes de que fuera muy tarde. Justin negó con la cabeza dejando pequeños besos en mi hombro mientras intentaba desgarrar mi blusa. - ¿Y no te parece que vamos muy rápido?

-Megan, si crees que algo va mal, no soy yo...eres tu.

-Bueno, esperaba algo como, no eres tu, soy yo pero, eso esta bien. - Respondí dudosa.

-Solo...deja de maquinar.

"Deja de maquinar, solo será sexo. Él se olvidará de ti." Repetía en mi mente cada vez que una prenda más desaparecía de nuestros cuerpos, ese era el único fuerte que tenía para seguir adelante, la ropa. ¿Y ahora qué no había ropa? Miré sus ojos, y comencé a repetir en mi mente que solo sería sexo entre, ¿colegas? ¿compañeros de trabajo? ¿amigos? Lo que sea que fuésemos. 

Sus gruñidos eran constantes, como mis gemidos. No había forma de que esto fuera mejor, no había forma de que este fuera el mejor sexo de mi vida. Mis manos se desesperaron por encontrar algo de que aferrarme en los últimos minutos, mis pies se retorcieron incapaz de no temblar como mis piernas cuando Justin las cogió hasta ponerlas en a cada lado de mi cabeza.

-Eres como un trozo de carne jugoso...- Dijo tirando la cabeza hacía atrás.- Todos los hombres quisieran tener...esto si en verdad vieran lo que eres.

-Yo...creo que, tu has sido el único que realmente...ha visto que soy un trozo de carne...¡Dios! - Grité cuando sentí el orgasmo golpear en mi interior. - jugoso...

Justin rió.

-Supongo que soy afortunado. - Dijo colocando ambos brazos debajo de su cabeza.

-No has sido el primero. - Dije sin dudarlo.
Él rió aún más. -¿Qué es tan chistoso?

-Que no hablaba de ser o no el primero, hablaba de ser afortunado por haberte dado el mejor sexo sabiendo que la lista de hombres que habrán pasado por tu cama debe ser interminable. Créeme cuando te digo que no me interesaría ponerme a contarlos.

Abrí mi boca indignada. Elevé mi puño que sin pensarlo se dirigía directo a su estomago, pero él fue más rápido.

-Solo para que lo sepas, no tengo una lista. ¿Vale?

-¿Solo por eso tenías la intención de arrancar algún órgano de mi estomago?

-Tal vez...- Dije meneando la cabeza. Recosté mi cabeza en la almohada, viendo por la ventana las estrellas iluminando el cielo. - Tienes buenas vistas desde aquí.

-Sí, lo sé. - Contestó observando con atención cada estrella del cielo que se podía ver por la gran ventana de su habitación.

-Debes quedarte hasta tarde todas las noches con una vista así...Bueno, por lo menor yo no podría dormir.

Justin soltó una pequeña risa. - Yo tampoco puedo, pero siempre es mejor dormir acompañado. ¿No lo crees? - Preguntó girando su rostro para quedar con la vista fija en mis ojos. Se veía perfecto siendo iluminado por la luz de la luna, se sentía tan puro por el aire de verano que entraba, se veía simplemente como un hombre perfecto.

-¿De dónde eres?

-¿Qué? - Preguntó.

-Tu, Justin Bieber... eres la puta perfección. - Contesté riendo. Justin soltó una pequeña sonrisa mientras acariciaba mi cabello, hasta que se unió a mi risa que no paraba. No sé a que hora caímos rendidos, pero lo último que recuerdo fue estar follando otra vez bajo las estrellas.