12. De vuelta.

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JongIn había pasado un mes completo en el hospital debido a complicaciones con su salud. No dejaba de molestar su propia herida y eso desesperaba a los enfermeros.

KyungSoo había dejado de pasarse por su habitación desde que se negó a dejar que lo bañara, así que estaba mas solo que nunca.

Veía televisión la mayoría del tiempo, a pesar de que no entendía lo que pasaban por allí. Jugaba con sus propias orejas y charlaba con Chanyeol.

- ¡JongIn, te dejaran salir hoy!- Avisó Chanyeol entrando a la habitación del híbrido con una de sus enormes sonrisas.

JongIn se emocionó, pero no por las palabras del alto, sino porque KyungSoo venía detrás y lo había extrañado mucho. Aunque no lo admitiría en voz alta. Nunca admitiría que quería volver a besarlo y apretujarlo entre sus brazos hasta que sus mejillas se tornaran rojas. Aún estaba molesto, se sentía tonto por revelar sus sentimientos y haber quedado como un zapato frente a él. Su orgullo hablaba por él y sus acciones.

- Llamaré a las enfermeras para que ordenen tu salida- Avisó el pelinegro dejando un bolso que no había notado sobre la cama- Tu ropa, para que te cambies y podamos ir a casa.

Asintió como respuesta mirando los bonitos ojos oscuros y profundos del mayor.

- Bien, vuelvo en un momento- Volvió a decir mientras caminaba hacia la puerta con rapidez.

JongIn escuchó la puerta cerrarse y se giró hacia Chanyeol. Este le entregó una leve sonrisa apoyándose sobre la cama.

- Vas a solucionar las cosas, ¿No?- Cuestionó cambiando el gesto en su cara. El chico gato lo miró apretando sus albios entre sí.

- Supongo. Si él quiere...-

- Claro que quiere, sólo que rechazas sus acercamientos. Me dijo que no quieres que se te acerque.

- ¡Eso no es...!- Chanyeol levantó una ceja, gesto que lo silenció- Sólo algunas veces hice eso, pero...-

- Entonces, ¿Cómo piensas recuperar su relación si no dejas que esté en la misma habitación que tú?- Golpeó levemente su hombro. JongIn suspiró haciendo un puchero- ¿Acaso olvidaste lo que hablamos la primera vez que estuviste aquí? Se supone que tratarías de arreglar todo. Tenías más posibilidades estando aquí que en casa porque KyungSoo estaría pendiente de ti todo el tiempo, pero perdiste la oportunidad rechazándolo, así que acepta tus consecuencias- Volvió a palmear su espalda. El felino maulló apartando las sábanas de sus piernas. Con ayuda del mayor, se levantó y sacó la ropa del bolso junto a él.

- ¿Puedes darte la vuelta? No me gusta que me vean- Murmuró sonrojándose. El castaño se rió saliendo de la habitación y advirtiéndole que si necesitaba algo, que no dudara en llamarlo.

Agradecido, el pelinegro se sacó la extraña bata azul que tenía encima. Se puso la camisa, que le quedaba un poco larga y trató de ponerse el pantalón, no lográndolo porque al inclinarse le dolía la herida.

Se mordió el labio deseando que KyungSoo estuviera allí para ayudarlo y acarició su cola pensando que hacer.

- ¡Chanyeol!- Gritó tapándose con la bata sus partes. El orejón se asomó por la puerta y le hizo una seña para que se acercara.

- ¿Qué sucede?- Preguntó poniendo ambas manos en su cintura.

- No puedo agacharme, me duele hacerlo- Se quejó.

- Bien, te ayudo- El alto se arrodilló junto a él y ayudó a subir su bóxer de bob esponja- Estate tranquilo, he visto a muchos gatos sin nada, no hay problema.

Kitten (KaiSoo) ||Editando||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora