Poco a poco.

1.2K 36 2
                                    

 Capitulo4.

-Me parece buena idea – le sonreí tiernamente-

Nos sentamos en mi sofá cada uno en una esquina con dos mantas. Nos quitamos los zapatos y nos relajamos.

-¿Quieres algo de beber o de comer? – le dije después de diez minutos en los que no podía parar de mirarle-

-Pues si me traes un refresco te lo agradecería. Y unas palomitas y ya te hago un monumento – rió-

Reí con él, era tan graciosete.

-No hace falta eh JAJAJAJAJA.

Me levanto y voy hacia la cocina descalza, se me quedaban los pies helados.

Cojo los refrescos. Un par de coca-colas y meto las palomitas en el microondas. Mientras explotan dentro de la bolsa yo tengo mi mente en otro lado.

¿En realidad quiero que Justin solo sea mi amigo?

Osea, me refiero ahora. Ahora mismo si quisiera podría besarle. Pero tengo miedo. Miedo de que desaparezca otra vez y me deje sola. Aunque quizás desapareció por el hecho de que no éramos nada. ¿Y si lo fuéramos todo?

Joder _____, deja de pensar y actúa.

Llego al salón cargada por las palomitas y los vasos. Cuando me ve, se levanta rápido y me ayuda.

-Trae,  que eso es mucho peso para ti.

-¿Insinúas que soy una debilucha?

-Insinúo que las chicas sois menos … ya sabes …

-Niñato.

Me mira con cara seductora y se tira en el sofá ocupándolo todo.

-Eh , ¿no me haces un sitio? – digo enfadada-

-¿No puedes tumbarte a mi lado o qué?

-No.

-¿Por qué? No te voy a violar ni nada eh , traquila – me dice riendo-

Me hace gracia, no puedo evitarlo , me hace demasiada gracia esta situación.

Me acerco e intento hacerme un hueco, pero como no lo consigo termino tumbándome a su lado.

-Así me gusta.

-Eres muy listo me parece a mi.

-Eh , una pregunta , ¿dónde está la chica dulce de ayer que lloraba al verme? Parece que ha desaparecido. Estas muy borde cuando lo único que intento es tenerte cerca de mi. Pareces no entenderlo …

¿Enserio acababa de decir eso? Tenía razón. Soy una borde con él. Pero es porque tengo miedo. Solo por eso.

-Lo siento Justin. Tienes razón. – Me incorporé para irme al baño a llorar-

-Eh ,no te vayas – tiró de mi hacia él-

De tal forma que quedé con mi cabeza en su pecho. Mirándonos a los ojos fijamente mientras me apartaba el pelo de la cara.

Era de lo más romántico si soy sincera. ¿Quién no ha soñado con estar frente a frente con el chico que le gusta?¿Bajo la misma manta? Era todo perfecto. Solo faltaba el beso.

-Me gusta cuando estás así _____.

-¿Así? ¿Cómo?

-Abrazándome.

Sonrío.

-Me gustan tus ojos.

-Eh, te has fijado en mis ojos color miel. Yeah , Swag.

Curando las heridas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora