Cuando finalmente todos marcharon a sus respectivas casas. Ayudamos a mi madre con la limpieza y luego subimos a mi cuarto. Claro que hablo de Emma y Grace, ya que las había invitado a quedarse dormir en casa.
Hicimos de todo menos por supuesto, dormir. Nos maquillamos, disfrazamos, cantamos, hicimos vídeos, y miramos una película de amor. Cuando estábamos mas o menos agotadas y eran las 5 a.m nos sacamos el maquillaje, disfraces y demás cosas. Nos acostamos, pero claro que no a dormir, sólo a charlar. Hablamos de todo: comida, programas de televisión, canciones, temas del colegio, ropa, personas que no nos caían bien y etc. Hasta que tocamos el tema... amor. Yo nunca había estado enamorada en mi vida, quizá si me gustaron algunos chicos, pero nunca había sentido más que atracción por ellos. Sólo había tenido una relación en mi vida, si es que se le podía llamar asi, porque sólo fue cosa de niños de primaria a los 13 años. Emma y Grace habían tenido algunas relaciones, por lo tanto siempre querían buscarme pareja y organizarme citas, aunque usualmente las terminaba rechazando.
-Entonces Serena... ¿en quién estas pensando tanto? -dijo Grace sacándome de mis pensamientos -En nadie Grace, sólo pensaba. -respondí
-Como sea, tu primo Luke es hermoso. ¿Por qué no nos lo habías presentado antes? -saltó Emma. Grace y yo reimos mientra Emma nos miraba extrañada.
-Oh, asi que te gustó Luke ¿eh? Pues mañana se lo diré -Emma abrió los ojos como platos -No Serena , no seas mala persona. -Grace y yo volvimos a reir -Claro que es broma Emma, no sería tan mala como para hacerte eso -Emma suspiró aliviada.
-¡Chicas lo había olvidado! -dijo Emma. Enseguida la miramos como para que continuara con su anuncio -Recuerdan que mamá se había opuesto a que estudiara diseño de modas? - asentimos con la cabeza -Bueno, con todo eso del cumpleaños se me olvidó decirselos pero... Ayer en la mañana ella misma me dijo que conseguí una beca para estudiar diseño de modas en una universidad muy importante a la que no esperaba entrar. -Grace y yo quedamos boquiabiertas
-En verdad te lo merecías Emma, felicitaciones!! -Hicimos un abrazo grupal y nos volvimos a separar -Y tú Serena, ¿pudiste hablar sobre tu sueño con tus padres? -preguntó Emma. Bajé la cabeza desanimada -No... creo que nunca lo lograré. No me animaré a enfrentarlos y decirles que no quiero estudiar medicina. Si llego a probar suerte en la música y me va mal ¿Que haré luego? volver a vivir con ellos?... No quiero decepcionarlos -Grace y Emma me miraron tristes y me abrazaron. -Ya lo lograrás Serena, podrás decirselos, irás al MSG y te convertirás en la mejor cantante del mundo -dijo Grace intentado animarme. Sonreí. Pero esta había sido una sonrisa sincera, una sonrisa que decía 'Gracias', una sonrisa que sólo podían sacarme mis amigas.
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El resto del día lo pasé en un spa con Grace y Emma, ya que ese había sido su regalo por mi cumpleaños. Nos la pasamos genial, la verdad creía que sería aburrido, pero las chicas del lugar eran muy divertidas y hasta nos ponían la música que les pediamos. Cuando llegué a casa me sentía totalmente relajada. Era domingo cerca de las 21:35, mañana tendría colegio y no había terminado las tareas de matemática. En ese momento deseaba que los 4 meses que me quedaban de escuela ya hubieran terminado, pero como no era posible tuve que intentar hacer los ejercicios, no entendía absolutamente nada sobre inecuaciones asi que hice que lo que pude. Miré mi reloj y ya eran casi las once ¿Tanto demoraba en hacer 8 ejercicios de matemática? guardé mi carpeta en la mochila, me puse el pijama y me acosté a dormir... o eso pensé. Eran las 3 a.m y no podía conciliar el sueño, daba vueltas en mi cama sin poder pegar un ojo. Finalmente lo conseguí, pero ¿para qué? en cuanto logré dormirme empecé a soñar algo, más bien no era soñar, si no una pesadilla. En ese instante consideré que hubiera sido mejor quedarme despierta. En el sueño yo era una especie de Alicia, pero este no era el país de las maravillas. Empezé a correr hacia un árbol, tropezé y caí en un pozo sin fondo, caí y caí y caí. Lo peor de todo, es que lo sentí tan real que en realidad creía que estaba cayendo. Finalmente terminé de caer, pero no veía nada, todo era oscuro...
-¡SERENA! Serena despierta ya -abrí mis ojos y ahí estaba Thomas. Suspiré aliviada, nada había sido real -Serena, ya cámbiate, mamá dice que tu manager ya llegó y que tienes una entrevista dentro de unas horas -¿Qué? ¿De qué hablaba Thomas? y ahora que estaba más despierta ¿Qué era este lugar? Definitivamente no era mi habitación.
-Thomas ¿Qué pasó? ¿Qué es este lugar? -pregunté confundida y algo asustada. Curiosamente, algo me decía que esto no era bueno.
-Serena ¿acaso eres tonta? es nuestra casa -lo miré ahora más que confundida ¿qué pasaba? ¿nos mudamos? Era literalmente imposible, cuando me dormí estaba en mi habitación, y ahora estaba en una totalmente diferente.
-Debe ser sólo un sueño -pensé. Me pellizqué para comprobarlo pero... nada pasó. Seguía allí en esa habitación que no era la mía con Thomas mirándome confundido. Mi cara se tornó complemente pálida, definitivamente, esto no era producto de mi imaginación.