Capítulo 62 ~ Olas de cereza (+18).

371 16 7
                                    

El camino de vuelta a casa fue por decirlo menos extraño. Papá condujo el Mustang en silencio, Marie iba junto a él mirando el camino, y yo abrazaba a Taemin en el asiento trasero. Nadie dijo nada, ni una sola palabra, y el silencio del ambiente, unido a todo lo que rondaba en mi cabeza me resultaba irónicamente ensordecedor. Miré a Taemin varias veces solo para comprobar que tenía su vista fija en la ventanilla, mientras sus manos acariciaban mi cabello sin muchos ánimos. Cuando bajamos del auto Taemin subió al segundo piso en completo silencio, y cuando intenté seguirlo mi abuela me detuvo con cuidado diciéndome que era mejor dejarlo solo por ahora, que seguro tenía mucho que pensar y que necesitaba su espacio. Asentí en silencio y me dejé caer en el sofá, prendí la televisión y me dediqué a mirar un programa de cocina sin prestarle atención, mientras acariciaba a Lori, que era la única que parecía no estar al tanto de todo; deseé más que nunca en la vida ser ella en ese momento.

Marie preparó pasta para la cena, y luego de casi tres horas de estar solo en su habitación, Taemin bajó a la cocina y comimos los cuatro juntos. Mi abuela intentó hablar sobre cualquier cosa, pero las sonrisas incómodas y fingidas de Taemin simplemente hacían el aire irrespirable. Mi padre y mi abuela terminaron de comer más que rápido, Marie se despidió de nosotros con apretados abrazos y se fue a su casa, y papá subió a su habitación musiando un tibio "buenas noches".

Volví mi vista hacia Taemin comprobando que había comido muy poco, y que solo se había deciado a jugar con la comida en su plato, dejando caer su cabeza en una mano.

- Tienes que comer algo, te ves muy delgado – le pedí, acariciando su cabello que lucía mucho más largo ahora.

- No tengo hambre – fue su única respuesta.

- ¿Estás bien? – le pregunté, porque su ánimo alicaído hacía todo insostenible.

Levantó la cabeza y me sonrió tiernamente, apartó el plato frente a sí y acomodó mi cabello detrás de mi oreja.

- Sí, es solo que estoy cansado y necesito dormir.

- ¿Estás seguro?

- Sí, tranquila, no me pasa nada – su dedo índice se acomodó bajo mi mentón y me dio un tierno beso.

Era el primer beso real que obtenía de él luego de tanto tiempo, y me resultó tan frío pero reconfortante al mismo tiempo que sentí que mi cabeza hacía cortocircuito.

- ¿Quieres dormir solo? – pregunté confundida – es decir, estás cansado y no quiero...

- Nunca serías una molestia, Danielle, y créeme que no hay nada que quiera más que dormir contigo – acarició mis mejillas con ambas manos y sonrió otra vez.

Al menos la sola necesidad que demostraban sus palabras me hacía sentir un poco menos extrañada de todo esto. Era como si el Taemin que había salido de la cárcel fuera uno completamente distinto. No bromeaba, no reía, y lo más impresionante de todo, ni siquiera miraba con odio a papá; era como si en cambio estuviera fuera de sí mismo todo el tiempo, su falta de ánimo era demasiado extraña y necesitaba saber por qué.

- Ven, vamos a la cama, preciosa – me tomó de la mano y me llevó escaleras arriba.

Fui a mi habitación por mi pijama y a cepillarme los dientes, y cuando volví a la suya entrando casi con miedo, él estaba saliendo también de su cuarto de baño, con el pecho desnudo y su pantalón de franela gris. Me miró de arriba abajo, haciéndome sentir tan nerviosa como cuando todo comenzó, y luego me sonrió como todo un niño mientras caminaba a su cama. Se sentó en el colchón y dio pequeñas palmaditas a su lado invitándome a acomodarme junto a él. Asentí tímida, cerré la puerta y caminé a su cama algo confundida. Me metí dentro de las cobijas y Taemin se acomodó para abrazarme muy cerca de su cuerpo.

Not forget, Not forgive ~ Lee Taemin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora