Creo que estoy embarazado

Cap. 17 "Granada"

–Mañana estarás ocupado – pequeño silencio – Mañana mi bebé va a querer ver a su padre –

–Quieres decir que... –

–Sí – Nos deshicimos del abrazo – Llegó la hora –

Tardé al menos tres segundos en reaccionar, tres segundos en los que experimente muchas sensaciones, primero un letargo, pasando por la sorpresa, una gran alegría acompañada de nerviosismo, un poco de temor y otro tanto de emoción para finalmente llegar a la no sé si llamarla valentía o coraje o simplemente sensatez. El punto es que después de esos tres segundos donde me quede como estatua, no pregunté más, respiré profundamente y me puse en marcha.

– Hinata, vamos a adelantarnos – Le indiqué mientras creaba 7 clones de sombra – Les avisaré a los demás para que nos alcancen – Y mientras uno se dirigía a la habitación de mi madre, los demás nos acompañaron hasta la puerta, en cuanto salimos de la casa, todos nos separamos

– Naruto, aun puedo caminar sola – Me dijo en cuanto la tomé entre mis brazos, yo simplemente me limité a mirarla y sonreírle, era curioso que aun en esta situación le diera pena que hiciera estas cosas, ¿Cómo lo sabía? Porque un sonrojo comenzó a formarse en su rostro, pero también era curioso que intentara hacerse la fuerte en todo momento, pero esa era mi Hinata.

De acuerdo a como se había planeado, me dirigí al sur de la aldea, era la menara más corta de llegar al bosque y de ahí iniciar el camino al mismo lugar donde vi la luz del mundo por primera vez. Si se tratara de un embarazo convencional, de una pareja convencional, lo más lógico es que se llevara a cabo en el hospital de la aldea o en la mansión Hyuga, o incluso nuestra casa, pero si es que sucedía lo mismo que en el parto de Matsuri, digamos que esos lugares no son los adecuados para realizar un muro de contención de chakra.

Estaba algo impaciente, si por mi fuera, nos habríamos tele transportado al lugar, pero ya Tsunade me había hablado al respecto y dijo que era muy peligroso tanto para Hinata como para el bebé, que la única manera de transporte segura, era la convencional, esa que no implica ningún tipo de flujo de chakra en exceso, por lo mismo, tampoco podía entrar en modo sennin y mucho menos en modo Kyubi para acelerar nuestro avance.

Aunque también de esta forma les daba tiempo a los demás de alcanzarlos. Ya estaba prácticamente en los límites de la aldea cuando me percaté de que uno de mis clones de había desvanecido.

– ¡Mamá! – Llamó urgentemente a la puerta mi clon

– ¡Ya voy ttebane! – Respondió mi madre detrás de la puerta, mi clon siguió insistiendo.

– ¡Te dije que estaba lista en 10 minutos dattebane! – Dijo después de abrir la puerta.

–Ya es la hora – Se limitó a informar mi clon a una Kushina que aunque ya estaba vestida, aun llevaba la toalla en el cabello. Mi madre abrió los ojos por la sorpresa.

– ¿Dónde está Hinata? – Preguntó

–Esta con el verdadero, ya van en camino – Se limitó a informar mi otro yo, dejándole ver que solo se trataba de un clon.

–Ya veo, y supongo que ya llevan todo – Dijo comenzando a salir de la habitación.

– ¿Todo? – Preguntó el otro Naruto.

–Ese idiota – Se limitó a susurrar mientras se dirigía a la habitación destinada al futuro miembro de la familia Namikaze – Que surte tiene que esté aun aquí – Dijo tomando una pequeña maleta que estaba cerca de la puerta de la entrada a la habitación